Para cuando doña Josefina acordó, ya se le habían metido a su terreno.

Le destruyeron la cerca, le tumbaron los árboles, las nopaleras, le mataron a sus gallinas…

Y comenzaron a levantar los cimientos de una bodega de block en el fondo de la casa que ella y su esposo Mateo han habitado por más de 50 años.  

En total fueron 16 por 25 metros de tierra lo que, dice, les arrebataron.

La desgracia de doña Josefina Plascencia, de 73 años, y de su esposo Mateo Cervantes, de 88, comenzó en febrero pasado, cuando, alegando que era el dueño un señor llamado Mario López Fuentes, que trabaja en la Dirección de Ingresos de la Presidencia Municipal, le invadió su casa, una finca de 25 por 50 metros, plantada en la calle Juan Félix Herrera, número 194, de la colonia Nazario Ortiz.

Los trabajadores de López Fuentes tumbaron cinco árboles, entre granados y duraznos, mataron a las gallinas de doña Josefina, construyeron una barda divisoria y luego una suerte de bodega.

Josefina y Mateo, que se dedican a pepenar basura para luego venderla, no pudieron hacer nada.

Doña Josefina narra que desde hace unos cinco decenios a don Mateo, que era trabajador de los antiguos dueños de la finca, lo dejaron cuidando el lugar sin remuneración alguna y aquí se quedó. 

Josefina reconoce que Mateo no tiene escritura del predio, pero sí la posesión, por ley, de la casa.

Un día apareció Mario López, quien se ostentó como el propietario de una porción trasera de la casa de doña Josefina y su esposo Mateo, y comenzó a construir.

Desde entonces doña Josefina y don Mateo han peregrinado por distintas dependencias de Gobierno para denunciar el robo de su terreno, pero nadie les hace caso.  

LE EXTRAÑA

Entrevistado por VANGUARDIA, Mario López Fuentes, el presunto invasor del predio de doña Josefina, y que trabaja en el área de Ingresos del Ayuntamiento de Saltillo, se dijo extrañado ante las acusaciones de la pareja.

Comentó que cuenta con toda la papelería, incluyendo escrituras de la propiedad, número oficial, licencia de uso de suelo y de construcción, que lo acredita como dueño legítimo del lote de 25 por 16 metros ubicado al fondo de la casa de doña Josefina, lote que le vendió una persona de nombre Rolando Jiménez y que era el último dueño de la propiedad.

Así mismo López Fuentes declaró que él ha dado a Josefina y a su esposo diversas compensaciones económicas por el predio.

“De hecho ella me entregó limpio, dijo ‘yo te lo entrego limpio’. Le he estado dando dinero a su nieto Jesús y ahí andamos apoyándolos”, narró.

Asimismo, recordó que en 2017 un juez ordenó un desalojo para darle a él la posesión del terreno.

Por eso se dijo extrañado de esta denuncia.