TIJUANA.- América sobrevivió en la frontera. Se aferró a las manos milagrosas de Agustín Marchesín, que mantuvo el 1-1 final.

El polémico silbante Luis Enrique Santander convalidó el tanto de Oribe Peralta en fuera de juego (25’), tras un desborde de Cecilio Domínguez.

Para demostrar que su incapacidad es imparcial, decretó una pena máxima inexistente para los Xolos. Sólo la falla de Gustavo Bou en el cobro desde los 11 pasos evitó que el ridículo fuera peor.

La resistencia emplumada cedió (66’) con una anotación de Bolaños. 

En ese momento, Tijuana se quedó con 10 elementos por la expulsión de Damián Musto.

América sacó el empate para llegar a 17 puntos. Supo que tiene un héroe en el marco: el siempre eficiente Marchesín.