Alerta Secretaría de Educación en Coahuila sobre práctica del Sexting entre alumnos de primaria y secundaria

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Alerta Secretaría de Educación en Coahuila sobre práctica del Sexting entre alumnos de primaria y secundaria

Foto: Especial
La dependencia recomendó a los padres de familia aplicar medidas preventivas como vigilar el uso del celular en sus hijos, así como regular el uso del Internet en casa

Acuña, Coah.- La SecretarÍa de Educación de Coahuila alertó a los padres de familia sobre el Sexting (intercambio de mensajes de contenido sexual y pornografía a través de teléfonos celulares) ya que esta práctica se ha detectado entre alumnos de quinto y sexto grado de primaria y primero y segundo año de secundaria.

El jefe de la coordinación 401 de escuelas secundarias del Estado, José Antonio Campos Ontiveros, recomendó a los padres de familia aplicar medidas preventivas como vigilar el uso del celular en sus hijos, así como regular el uso del Internet en casa.

Consideró que la medida que en un principio se practicaba en los teléfonos celulares hoy se ha extendido a las computadoras y no solo por SMS sino a través de todas las redes sociales, lo que propicia que los niños y adolescentes sean presas de los tratantes de personas.

Jefe de la coordinación 401 de escuelas secundarias del Estado, José Antonio Campos Ontiveros. Foto: Vanguardia/Josué Rdz.

“Asignar ciertos horarios para que los hijos hagan su tarea o consulten sus correos o redes sociales, siempre vigilados, es una muy buena medida en casa que puede prevenir que los contacten los delincuentes”, subrayó.

El funcionario de educación se mostró a favor de que en las escuelas estén prohibidos los celulares, medida que busca evitar este tipo de situaciones.

Inicialmente el Sexting hacía referencia únicamente al envío de SMS de naturaleza sexual, pero después comenzó a aludir también al envío de material pornográfico (fotos y videos) a través de teléfonos celulares y computadoras.

La primera referencia al Sexting data de 2005 del periódico Sunday Telegraph y desde entonces se ha constatado su existencia en diversos lugares del mundo, con mayor incidencia inicial en los países anglosajones: Australia, Nueva Zelanda, los Estados Unidos de América y Reino Unido.