“Todos tenemos sangre migrante; está en nuestro ADN”, dice el historiador Carlos Recio, a raíz de la llegada de la caravana migrante a México. 

A través de la Escuela de Ciencias Sociales de la UAdeC, el historiador realizó una investigación inédita en conjunto con la alumna Mónica Amézcua, donde aborda el tema de la migración hacia los Estados Unidos; sin embargo, otros historiadores de la misma escuela también han abordado temas como el de la migración forzada, por ejemplo, Carlos Manuel Valdés y Hernán Venegas, así como de los Negros Mascogos a cargo de Ernesto Terri. 

Tras la discusión que ha generado polémica en las redes sociales, el historiador y profesor de la Escuela de Ciencias Sociales, detalla que sin el fenómeno de la migración la sociedad global no hubiera podido conformarse.

Carlos Recio dice que de acuerdo con las hipótesis planteadas, el primer ser humano del mundo tuvo sus primeras señales de vida en África hace un millón 700 mil años, mejor conocido como el Homo Ergaster que se trasladó posteriormente para habitar Asia. 

Un millón de años después, viajó a Europa siendo el homo ancestor, y posteriormente a América por el Estrecho de Bering hace 15 mil años. 

“En Saltillo se han recibido migraciones importantes de libaneses, japoneses, italianos. Es una postura ingenua o algo ignorante el que haya gente que rechace a los migrantes cuando ellos mismos son producto de la migración. Negar a los migrantes es como negarse a sí mismo”, expresa.