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Aborto, misma barbaridad que ejecuciones del narco: Sandoval Íñiguez
El aborto es un delito que se comete con la misma barbaridad con la que el crimen organizado ejecuta a sus víctimas, afirmó el cardenal Juan Sandoval Íñiguez.
Durante la misa que ofició en el acto de desagravio y consagración que se realizó en el Estadio Azul, en la Ciudad de México, el cardenal emérito pidió perdón por el pecado cometido con la despenalización del aborto.
“Hemos pecado con el crimen más tremendo, más grave y más cruel, el del aborto, practicado a lo largo y ancho de nuestra patria, a veces con el consentimiento de las leyes inicuas y a veces ocultamente, furtivamente, pero siempre con crueldad, con alevosía y ventaja contra el inocente, el indefenso”, dijo.
“Muchos miles de inocentes son asesinados constantemente en el vientre de su madre y como contrapartida, en castigo de este delito, el crimen organizado mata y descuartiza a sus víctimas, igual que se destroza a los niños en el seno materno”, añadió el cardenal.
El evento fue realizado por iniciativa de diversos grupos católicos y miembros de la sociedad civil, quienes también oraron por la paz y la justicia del país y buscaron reconciliar a México con Dios por las lecciones aprendidas luego de los sismos del 7 y 19 de septiembre.
El cardenal Sandoval afirmó que la ideología de género atenta contra la familia y la vida para “arruinar a los pueblos, subyugarlos y cercarlos.
“Sin moral ni familia, nuestra patria no tiene futuro. Perversa ideología de género, impuesta desde fuera, pero que encuentra entusiastas promotores en nuestro país”, agregó.
Señaló que con la corrupción, situación que en la actualidad alcanza niveles nunca vistos en el país, también México ha cometido pecado.
Luego de la misa oficiada por Sandoval, el religioso condujo a los feligreses, quienes ocuparon aproximadamente medio estadio, a una procesión en la que algunos penitentes se flagelaron para pedir perdón por sus pecados.
La procesión a las 15:44 horas junto a los edificios que colapsaron durante el sismo del 19 de septiembre en la calle de Escocia.
Ahí, los más de 3 mil asistentes guardaron un minuto de silencio para recordar a las víctimas del terremoto y de los abortos.
Luego se dirigieron a la Iglesia del Purísimo Corazón de María, sobre la calle de Gabriel Mancera, donde el cardenal bendijo a los asistentes, quienes concluyeron el día con cantos y aplausos.