La Casa del Migrante de Saltillo dio la espalda a la propuesta de Andrés Manuel López Obrador, próximo Presidente de la República, de crear una Policía Fronteriza que impida el ingreso de indocumentados al País, anunciada por Alfonso Durazo Montaño, futuro Secretario de Seguridad Pública federal.

“Una fuerza policiaca fronteriza, altamente especializada (…) que incluye impedir que las personas migrantes indocumentadas y los traficantes de personas crucen México, lo que a menudo hacen con la ayuda de funcionarios corruptos”, expuso Durazo Montaño a El Financiero Bloomberg el lunes pasado.

Aunque dijo que dicha iniciativa se deberá discutir, el futuro titular de la nueva SSP apuntó que –si se concreta– sus elementos serían desplegados en ambas fronteras de México.

Al respecto, la Casa del Migrante señaló que la corporación buscaría contener los flujos migratorios de centroamericanos, por lo que exigieron al próximo Gobierno Federal un alto a “discursos y planes xenófobos que atentarían contra los derechos humanos”.

CONDENA NACIONAL
Dicha petición, dirigida a través de redes sociales a Olga Sánchez Cordero, quien será secretaria de Gobernación con López Obrador, se suma a las críticas de organizaciones de la sociedad civil a nivel nacional, que demandaron una aclaración del anuncio.

En un boletín, las ONG coincidieron que, de llevarse a cabo la propuesta, no sólo se atentaría contra los derechos humanos, sino que aumentaría el número de violaciones de estos.

“La población migrante necesita una política migratoria con enfoque de seguridad humana, y no una que tenga en el centro la seguridad fronteriza”, subraya el documento difundido ayer.

En respuesta, Durazo Montaño publicó en Twitter que: “La migración es un problema humanitario, no de seguridad. Ninguna Policía tendrá responsabilidades vinculadas con migración; esa será tarea del INM. En la frontera sur apostaremos al desarrollo y a combatir la pobreza, y no reforzar el control policiaco”.

Con información de Sin Embargo