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9 cosas que debes saber sobre el DIU (Dispositivo Intrauterino)
Los DIU o dispositivos intrauterinos son un método muy efectivo para prevenir embarazos. Generalmente son hechos de plástico y tienen forma de una T. Son insertados en el cervix por un profesional, y dependiendo del tipo que se elija, pueden durar de 3 a 12 años funcionando. Según datos de Planned Parenthood, el mayor proveedor de servicios de salud sexual en Estados Unidos, estos pequeños dispositivos pueden llegar a brindar más de un 99% de probabilidades de prevenir un embarazo no planeado.
A diferencia de la píldora anticonceptiva u otras opciones en el mercado, los DIU son un método anticonceptivo el cual, después de insertarlo, prácticamente puedes olvidarte de él. Por esta razón, es muy popular entra las mujeres que prefieren no tener una rutina anticonceptiva o no correr el riesgo de olvidar tomarse la pastilla.
Existen dos tipos de DIU en el mercado: los DIU que secretan hormonas y los DIU hechos de cobre. A pesar de que trabajan de manera diferente, los dos son igualmente efectivos y cumplen el propósito de prevenir la fertilización del huevo.
A pesar de ser un método muy popular, hay muchos factores que debes tomar en cuenta antes de decidirte por él, y que regularmente no son discutidos. Entre ellos están los siguientes:
1. Su costo
El costo de un DIU depende del país en el que te encuentres y si cuentas o no con un seguro médico. En algunos países latinoamericanos, el costo de inserción de un DIU puede ser muy elevado. Sin embargo, debes considerar que no tendrás costos adicionales por muchos años después de ser insertado.
2. ¿Quién puede usarlo?
En el pasado se creía que estos dispositivos eran recomendados solamente para mujeres que ya hubiesen tenido hijos. Sin embargo, ahora se sabe que los DIU actualmente disponibles en el mercado son seguros para las mujeres con o sin embarazos anteriores.
3. El DIU de cobre es libre de hormonas
La mayoría de los sistemas anticonceptivos de receta funcionan a base de hormonas que alteran tu sistema reproductivo, pero a la vez suelen tener efectos secundarios no deseados. Si deseas un anticonceptivo seguro que no secrete hormonas a tu cuerpo, el DIU de cobre es totalmente libre de hormonas e igualmente efectivo.
4. Puede alterar tu periodo
Los DIU hormonales tienen la capacidad de hacer tus periodos más ligeros, y en algunos casos, hasta detenerlos en su totalidad. Los DIU hechos de cobre, al contrario, pueden hacer tu periodo más fuerte, especialmente al principio, poco tiempo después de ser insertado.
5. Son totalmente reversibles
Los DIU son considerados métodos anticonceptivos a largo plazo. Sin embargo, si cambias de opinión y deseas quedar embarazada, puedes simplemente removerlo en una visita médica y tu fertilidad no será afectada.
6. ¿Cómo se inserta?
El DIU debe ser insertado por un médico o enfermera. El proceso es rápido, generalmente dura 5 minutos. Con la ayuda de instrumentos especiales, tu doctor insertará el DIU por la abertura de tu cervix, dentro del útero. La T quedará dentro de tu útero, y un cordón de aproximadamente 2 pulgadas saldrá por tu cervix. Esto es para facilitar el proceso cuando desees removerlo.
7. ¿Sentirás el dispositivo o cordón?
Durante las primeras semanas, tu doctor te pedirá que hagas autoexámenes con tus dedos para sentir que el cordón sigue en la salida de tu cerviz. Esto es para garantizar que quedó en posición y no se movió. Durante las relaciones íntimas, tú y tu pareja no deberían sentir molestia alguna. En muy raras ocasiones, si el cordón es dejado muy corto, tu pareja puede llegar a detectarlo. En esta situación, puedes hablar con tu médico para corregir el problema.
8. ¿Puede salirse o moverse?
No comúnmente, pero en muy raras ocasiones, el DIU puede ser expulsado de tu útero, principalmente en los primeros 3 meses de haber sido insertado. Es importante que revises que está en su lugar buscando el cordón regularmente. Si tu DIU se sale, NO estás protegida contra el embarazo.
9. ¿Cuándo debes insertar el DIU?
El DIU puede insertarse en cualquier día del mes, y después de dar a luz.
Antes de tomar una decisión, consulta a tu ginecólogo para que juntos decidan cuál es el método anticonceptivo que más te conviene.