En la actualidad, hay aproximadamente 80 millones de baby boomers en Estados Unidos, según la Oficina del Censo, y muchos de ellos son abuelos.

Con los promedios de esperanza de vida en constante aumento, muchos de nosotros seremos abuelos durante 30 o 40 años o más. Antes las personas solían esperar a vivir lo suficiente como para convertirse en abuelos, ahora planeamos vivir para ver a nuestros nietos graduarse de la universidad, casarse y tener bisnietos para nosotros.

Con este tiempo adicional, muchos abuelos están fortaleciendo su definición de lo que es ser abuelos y pensando cómo este papel puede ocupar un lugar más central en sus vidas.

Este ciertamente ha sido el caso con nosotros. Recientemente dimos la bienvenida a los nietos No. 30 y 31.

Hace varios años, cuando estábamos tratando de formular exactamente cuáles eran nuestras metas y nuestros planes para ser abuelos, notamos que a pesar de los miles de libros para padres disponibles, había muy pocos libros sobre abuelos. Así que comenzamos a recoger nuestros pensamientos y empezamos un manuscrito escrito conjuntamente.

Nos dimos cuenta de que lo que las abuelas necesitan y quieren, y la forma en que piensan sobre su papel, es bastante diferente de lo que quieren los abuelos. Ambos roles de abuelos son importantes pero también distintos.

Sin embargo, muchas de las cosas más importantes se aplican tanto a los abuelos como a las abuelas. Algunas de las cosas clave que creemos que se aplican en todos los ámbitos son:

1. Establezca metas con respecto a la cantidad de tiempo que desea pasar con los nietos, luego haga planes sobre las formas de organizar ese tiempo de manera más efectiva. Encuentre un equilibrio entre demasiado tiempo y muy poco tiempo.

2. Esfuércese por una relación individual y única con cada nieto que represente la individualidad de ese niño y lo haga sentir especial.

3. Comprenda que lo mejor que puede ser para los nietos pequeños es su "amigo". Para los niños de primaria, esfuércese por ser su "campeón" y para los adolescentes y jóvenes adultos, sea su "consultor que escucha y no juzga".

4. Reúnase con los padres (sus hijos) para discutir y hacer una lluvia de ideas sobre cómo le va a cada nieto. Trabajen juntos para decidir quién puede hacer qué para enfrentar cada desafío y oportunidad. Hemos descubierto que las familias que adoptan este enfoque de trabajo, en equipo de dos generaciones, profundizan las relaciones a medida que trabajan sobre lo que es mejor para cada niño y quién es el mejor padre o abuelo para trabajar en ello.

5. Sea el enlace de conexión que informa a sus nietos de sus bisabuelos. Los niños que saben de sus antepasados, que tienen una narrativa familiar real, son más resistentes y tienen un sentido de identidad más fuerte que aquellos que no lo hacen.

6. Sea un recolector, el que une a la familia extendida y que facilita lazos fuertes entre primos y entre los niños y sus tíos y tías.

7. A medida que su situación financiera lo permita, sea un facilitador que ayude de manera inteligente, y en consulta con los padres, para satisfacer las necesidades de sus nietos. 

Algún tipo de subvención coincidente para oportunidades educativas y otras cosas que valen la pena, pueden marcar una gran diferencia.