Pocas personas conozco igual: mi amiga es una mamá cariñosa al extremo y con mucha paciencia levanta a sus hijos con besos y palabras tiernas: “Ya, mi cielo, ya levántate, hay que ir a la escuela mi amor”, y los vuelve a llenar de besos. Cuando los lleva a su escuela, los abraza varias veces y los besa. Al salir, se vuelve a repetir la historia de besos y abrazos junto con un “Te extrañé mucho, mi cielo”; luego les pregunta cómo les fue, qué hicieron, si se divirtieron.

Cuando los voltea a ver, los mira con mucha ternura y cariño, pero eso sí, con respecto a su alimentación, respeto a los demás y labores escolares es enérgica, sin llegar a los golpes y a los gritos. Es firme, precisa, sin llegar a ser autoritaria porque siempre les explica el por qué no puede ser permisiva en esos temas, aunque después que sus hijos la obedecen los vuelve a llenar de mimos, sin cansarse jamás.

¿En qué puede ayudar demostrar cariño físicamente a tu hijo?

A muchos puede parecer una exageración, sin embargo, las muestras de cariño pueden ser beneficiosas en la vida de tu hijo, desde sus primeros meses hasta la edad adulta. Aquí, algunas de sus bondades:

1. Desarrollo emocional

El pequeño va comprendiendo cómo es el mundo y de qué forma se maneja. A partir de eso va tomando conciencia de sus propias emociones, presentes y futuras, con las demás personas.

2. Seguridad

Un niño desarrolla mayor seguridad cuando se sabe querido, de alguna forma el cariño lo vuelve más valiente y, por consiguiente, más seguro para hablar, expresar lo que siente, lo que piensa, etcétera.

3. Repetición

Un bebé que siempre ha vivido rodeado de amor, cariño, respeto, tiende a repetir la misma conducta con la gente que lo rodea, no solo a esa edad, sino como adulto y con sus propios hijos.

4. Cariñosos

Los niños con padres “fríos”, es decir, poco expresivos de sentimientos, suelen repetir el mismo patrón porque solo conoce esa forma de ser. Lo mismo sucede con aquellos papás que les enseñan a mostrar sus sentimientos.

5. Tranquilidad

El amor hacia los pequeños hace que vivan en paz no solo de bebés, sino también de niños, cuando empiezan a entender todo mejor porque de alguna manera se sienten protegidos por el afecto de sus padres.

6. Desenvueltos

La misma seguridad que adquieren con tus mimos, los va a hacer más extrovertidos en los lugares donde se desenvuelva. En la escuela va a participar más y no le va a costar tanto trabajo el hablar en público nunca.

Amar es uno de los sentimientos más hermosos y únicos que podemos tener. Tu hijo es un gran regalo que Dios te ha mandado, tú fuiste elegida para ser madre de una pequeña criatura que requiere de toda tu atención, de tu alma y de tu amor. No te limites en expresarle a tu hijo lo mucho que lo quieres, de esa manera él tampoco lo hará nunca y lo podrás ayudar para que sea una persona eternamente feliz.