50 años de Super Bowl

Usted está aquí

50 años de Super Bowl

Otra de las cosas con la que los baby bombers nacieron, lo vieron crecer y madurar como uno de los espectáculos más atrayentes del mundo deportivo sin duda fue el Super Bowl, elemento clásico de la influencia cultural norteamericana de la guerra fría.

Pero sin duda que a lo largo de este tiempo quienes de una u otra manera nos hemos visto vinculados con esta disciplina deportiva, sea como fan o atleta nos sentimos agradecidos por los recuerdos de varias de estas epopeyas modernas en la que los gladiadores del domingo con sus relevantes actuaciones han plasmado momentos inolvidables.

Habrá quienes disfrutaron o sufrieron lo mismo con los triunfos que con las derrotas de sus equipos favoritos. Otros que quizá un tanto excéntricos en sus gustos hayan adoptado a equipos que poco o nunca han aparecido en el juego máximo. Aún con todo, el super bowl siempre guarda nuevas emociones, nuevos récords y nuevos protagonistas, así que se convierten en fieles al gran partido.

El Super Bowl es un juego especial, si bien hay dos campeones en la temporada. Los de la AFC y la NFC. Es el ganador del super juego el que finalmente escribe la historia y es por ello que en nuestra mente perduran las imágenes que nos regalaron Bart Star, Vince Lombardi, Don Shula, Tom Landry, Namath, Staubach, Griese, Los Acereros de la década de los años 70. Stabler, Biletnikoff, Madden, el gran Joe Montana y los 49ers de los ochenta, Lawrence Taylor, Jim McMahom, el “Refri” Perry y los Moustruos del Midwey, los “Cerdos” de Washington, el viejito Plunkett y su coach hispano Tom Flores.
  Los Vaqueros de la década de los 90, Troy Aikman y Emmith Smith; Kurt Wagner.  Elway y la llegada de los Broncos finalmente a la cima. Brady y los Patriotas del nuevo siglo, Brett Favre con sus Green Bay Packers.  Y faltaría espacio para citar a todos quienes han dejado profunda huella en el super domingo.

Hoy a la cita acuden dos equipos que fueron los mejores durante el otoño de 2015 y la postemporada de enero de 2016. Me gusta el duelo de los mariscales de campo. Me recuerda Newton la impetuosidad de aquel Joe Namath que retaba a todo y a todos, que enfrentaba a un veterano quarterback que además de longevo se tomaba muy en serio el football: Jhonny Unitas de los Colts de Baltimore. Joe, se río, se burló, usaba melena, era un digno representante de la juventud de los años sesenta en norteamerica osó citar a los medios en una bañera bebiendo champaña y aseguró apostando que ganarían el super tazón III. Y lo hizo, ganó. 

Hoy Newton es el irreverente, desafiante, burlón, osado, soberbio y con actitudes que desafían los principios filosóficos de respeto en la competencia. Y por el otro lado un quarterback que está a punto del retiro, en el quicio de la puerta con casi 39 años de edad jugador clásico, obediente de los sistemas, disciplinado, proveniente de una estirpe  deportiva que incluye a su legendario padre. Ese es Payton Manning. Señores la cita es hoy, la moneda en el aire, y que gane su favorito. ¡A disfrutar!.