Ser madre no es una tarea fácil, máxime cuando no se cuenta con el apoyo de la familia. Sin embargo, la única motivación por la que siempre se sale adelante son los hijos, no importa si hay o no apoyo externo.

Si tu problema, mujer y madre, es la necesidad de trabajar para poder progresar y cubrir todos tus gastos, por experiencia propia te digo; !sí se puede! Sin importar qué tan difícil sea la situación que tengas que vivir con tus hijos.

¿Te ha costado encontrar un trabajo en el que no descuides a tus hijos? ¿Te resulta difícil encontrar tiempos adecuados para trabajar y al tiempo cuidarlos, formarlos, educarlos, alimentarlos y amarlos como lo deseas?

Motivada por estas preguntas que a veces parecen no tener respuesta, quiero compartirte cinco ideas que he puesto en práctica y que fervientemente, creo, te ayudarán a sacar adelante a tus hijos. También serán de ayuda para llegar a ser una mujer completa y realizada. Pon manos a la obra y usa la idea que más se ajuste a tus circunstancias y posibilidades:

1. Ser tu propio jefe y empleado
Con un poco de dinero emprende tu propio negocio. Las ventajas son que tú misma lo administrarás y tendrás la libertad de cuidar a tus hijos y pasar por ellos al colegio. ¿El giro? Piensa para qué eres buena. Puedes realizar platillos caseros, o preparar comida para fiestas y eventos. Cocina en casa y lleva los pedidos a domicilio. ¿Publicidad? No necesitas más que platicarlo con las mamás de otros niños en la escuela para darte a conocer, dejar tarjetas con tu nombre y tu teléfono con las vecinas del barrio y tus amigas; incluso puedes repartir volantes. No te metas en un berenjenal y opta por comidas sencillas y populares, comida casera con mucho amor para empezar a tener dinero.

El menú es muy amplio: considera los tacos de comida casera (guisado) o de canasta, tamales, pozole, empanadas, postres, pasteles, gelatinas, entre muchas otras opciones.

2. Ventas por catálogo
Elige si es maquillaje, perfumes, ropa, zapatos, edredones y sábanas, joyería, bisutería, relojes, enseres de cocina, medicamentos y productos naturistas, vitaminas y complementos alimenticios, etcétera.

Para ofrecer tus productos aprovecha las relaciones con tus vecinos, amigas, mamás de la escuela de tus hijos. En este rubro hay que ser muy organizada por aquello de que muchos de esos productos se comercializan en cómodos pagos por quincena o por mes, es decir, las entradas de dinero para nuevas compras y las ganancias serán esporádicas.

3. Niñera en casa
Cuida niños. Así como tú, algunas mamás necesitan ayuda para cuidar a sus hijos mientras ellas trabajan o salen a cumplir con un compromiso. Del mismo modo, promociónate con tus amigos, vecinos y conocidos. Habrá así una entrada de dinero constante. Si tienes la fortuna de que los niños coincidan con la edad de los tuyos, cuidarlos y estar al pendiente de ellos te será menos cansado: alcanzarás dos pájaros de un tiro.

4. Clases de regularización
Si terminaste tus estudios y estás preparada académicamente, otra opción es convertirte en maestra de regularización: ayuda a los niños a trabajar en materias que les resultan difíciles, a realizar sus tareas en español, matemáticas, ciencias sociales, ciencias naturales, e incluso en el idioma inglés.

Este trabajo se cobra por hora y no tendrás que salir de tu casa; como en la recomendación anterior, podrás cuidar a tus hijos mientras generas una entrada de dinero constante.

5. Manualidades
Explota tus habilidades y conocimientos. Ofrece algún taller como hechura de pulseras y collares, cocina o estética, costura. Organiza también un bazar de productos navideños o para cualquier otra fiesta anual, eso va a depender de cuáles sean tus manualidades. Por ejemplo: juegos para baño, toallas o sábanas, etcétera.

Todas estas opciones, además de contribuir a la mejora de la economía familiar, te van a permitir acompañar, disfrutar a tus hijos, y brindarles tiempo de calidad. Y de paso, será un factor que contribuya a sentirte realizada, contenta y feliz por ser útil y amar a los tuyos.