1
Toma la iniciativa
Muchas mujeres sienten cierto pudor o vergüenza en expresar en manifestar su deseo sexual. Sin embargo, es muy saludable descartar tus prejuicios y aprender a expresar tus propios deseos. Una queja común de los esposos es que las esposas nunca buscan tomar la iniciativa en las relaciones maritales y a menudo ponen excusas cuando ellos las buscan. Es importante destacar que en una relación sana necesariamente es sostenida, buscada y compartida por ambos.
2
Ten cuidado con tu apariencia
Muchas mujeres, con el tiempo, se descuidan a sí mismas. Esto es un gran error. Una mujer necesita mantenerse bien cuidada, sano, con una apariencia que le guste a ella misma incluso para mantener en buen nivel de autoestima. Y también, no te cuesta nada agradar a los ojos de alguien que amas, ¿no lo crees?
3
No te menosprecies
Busca eliminar de tus pensamientos inseguridades del tipo: "Tengo sobrepeso", o: "No le gusta mi cuerpo". Ese tipo de ideas pueden afectar en gran medida tus relaciones íntimas. Como mujer, tú debes valorarte a ti misma y nunca permitir que en tu mente haya pensamientos que te menosprecien. Un buen consejo es resaltar lo que te gusta de ti misma, a fin de que eso llamar su atención. Piensa en esto: si tú no te encuentras interesante a ti misma, ¿cómo quieres que tu marido se interese?
4
Procura agradar para ambos
Observar lo que le gusta al hombre que amas es muy útil para el arte de agradar y es muy placentero para ambos. Ten cuidado de los detalles, repara e intensifica su placer, empezando con pequeñas delicias, como la atención y el afecto a lo largo del día. Esta es una gran arma de seducción. Una mujer amorosa siempre atiende bien a su marido -- y por supuesto que el también te debe de tratar de la misma manera, ¡recuerdalo!
5
Entrégate en cuerpo y alma
En tanto no rompa tus principios morales y éticos, nada debe detenerte en el momento de tu entrega para con tu esposo. Deja que tus sentimientos fluyan y libérate de los pensamientos desagradables, las emociones negativas o alguna molestia. El momento de la intimidad es para ser vivido y, sobre todo, compartido con el hombre que amas.