Noé Silva tenía tres años cuando Selena Quintanilla fue asesinada el 31 de marzo de 1995 por su amiga y presidenta de su club de fans, Yolanda Saldívar, en un hotel de Corpus Christi en Texas, el diseñador gráfico e ilustrador nacido en la Ciudad de México, pero saltillense por adopción, ha tenido presente a la Reina del Tex-Mex en algunas de sus creaciones, pues su familia constantemente escuchaba su música. Para él, Selena es un icono de la moda que representa el popular estilo ‘chicano’, el cual hoy en día influye en las tendencias globales de moda y alta costura. Hace cuatro años, Noé lanzó una playera con una ilustración de Selena con la expresión “Lo que sea por Selina’s Ese”, una frase perteneciente a la película biográfica de la cantante que fue interpretada en 1997 por una entonces desconocida Jennifer Lopez.

Dicha playera fue todo un éxito, inclusive influencers locales como Iliana Mellado, mejor conocida como Rosse Velvet, se han encargado de dar a conocer al mundo esta icónica prenda, por lo que el diseñador gráfico no ha parado ahí, también realizó una ilustración de la cantante mexicoamericana muy al estilo de “Los Simpson” para una banda de covers en Los Ángeles. “Me gusta mucho el tema de la cultura pop, el folclor mexicano y sobre todo la cultura ‘chicana’. Selena es un gran icono de cual se desprenden otras corrientes, es una inspiración para la moda, y sobre todo se ha convertido en la definición de un estilo”, comentó el ilustrador que el año pasado ganó el concurso de ¡Tu diseño en el vaso de Zapal 2019!

Como bien dice Noé, la Reina del Tex-Mex se ha convertido en un Fashion Icon, una flor que no se ha podido marchitar a pesar de su trágica muerte hace 25 años. La cantante no temía tomar riesgos a la hora de vestirse, ni mucho menos a la hora de cantar. Tanto sobre, como bajo el escenario, siempre lograba plasmar su estilo personal en su vida diaria, y así fue como sus elecciones de looks fueron influenciado a la gente. Además, la figura de Selena representa a los millones de migrantes radicados en Norteamérica en aquella década.

Selena y la moda guardan un vínculo muy estrecho, en 1992 la cantante lanzó una línea de ropa y dos años más tarde abrió su provpia boutique. De ella recordamos sus dramáticas blusas con volados, sus outfits de cuero, sus jeans de tiro alto, las lentejuelas, los bralettes, sus chamarras oversize, transparencias y sus escotes pronunciados, sin duda la intérprete de “Como la flor” era una auténtica prescriptora del estilo, y que hasta este 202o prevalece.

UN DESTINO FATAL

Selena corrió herida para pedir ayuda después de que Yolanda Saldívar, la presidenta de su club de fans y encargada de las boutiques de moda que Quintanilla poseía, le disparara. Todo comenzó cuando aparecieron incongruencias en las cuentas que dejaban ver la incapacidad de Saldívar para llevar el negocio y, más tarde, la cantante supo que se había apropiado de 60 mil dólares en cheques.

Cuando Quintanilla se enteró del desfalco de Saldívar, según Univisión, el padre de la cantante la despidió y la alejó. Sin embargo, Saldívar tenía diferentes documentos sobre la contabilidad de las empresas y el club de fans que Quintanilla necesitaba. Para que se los pudiese dar, Selena accedió a verse con su asesina.

Cuando ambas se vieron en el hotel, comenzaron a discutir por la documentación. Hacia el mediodía, cuando la artista se dispuso a salir del lugar y dejar atrás a su asesina, ésta le disparó con un revólver del calibre 38. Le dio tiempo de  huir para pedir ayuda, y para revelar quién la había herido antes de perder el conocimiento.

La asesina intentó huir, pero acabó entregándose. Saldívar en sus declaraciones, aparte de incurrir en contradicciones y acusaciones, dijo que la discusión vino porque era ella la que quería dejar de trabajar para Quintanilla. El mismo año del asesinato, fue condenada a cadena perpetua, aunque ha apelado su castigo.