WASHINGTON, EU.- Europa y Estados Unidos condenaron el aterrizaje forzoso de un avión comercial en el aeropuerto de Minsk por parte de las autoridades bielorrusas para arrestar al periodista Román Protasevich y acusaron al país de “silenciar voces opositoras”, algo que Rusia rechazó.

Tras una discusión a puerta cerrada en el Consejo de Seguridad de la ONU, Estonia, Francia e Irlanda (que solicitaron la reunión), Bélgica, Alemania, Noruega, Reino Unido y EU emitieron un comunicado conjunto pidiendo la liberación “inmediata” del periodista.

Consideraron que el avión, que llevaba un centenar de pasajeros, fue “forzado a aterrizar basándose en falsos pretextos dados por un avión militar bielorruso”, lo que supone “un ataque evidente” a la seguridad internacional de aviación civil.

El presidente de Bielorrusia, Alexandr Lukashenko, respondió con amenazas a las sanciones europeas por el incidente. Denunció que contra Bielorrusia se desató una “guerra híbrida de diversos niveles”, que busca “demonizar” al país.