Luego del accidente que protagonizara en el Gran Premio de Bahréin en el que se estrelló y su coche se incendió resultando con algunas quemaduras en sus manos, el piloto francés de la escudería Haas, Romain Grosjean, fue dado de alta este miércoles, según diversos reportes.

"El piloto de Haas Romain Grosjean ha recibido el alta del Hospital de las Fuerzas de Defensa de Bahréin. Grosjean pasó tres noches en el hospital tras su accidente del domingo en el Gran Premio de Baréin", comunicó el equipo.

Al piloto se le pudo ver con curaciones en sus manos, tratamiento que continuará de forma privado, según explicó Haas.

Las imágenes del accidente fueron impresionantes, muchos aseguraron que fue un milagro ver al piloto con vida luego de que el coche prácticamente se partiera en pedazos y se incendiara, por lo que las palabras de galo en redes sociales, donde dijo haber sentido un profundo miedo, no son para menos.

"Al final éste fue el momento en el que me di cuenta de que iba a vivir, cuando saqué mi cuerpo del chasis. Sí, me quemé. Sí, fue doloroso, pero no es nada en comparación con el alivio que sentí tan pronto como cuando pude levantarme. Sentí que las manos de Ian me empujaban a través de la barrera y sabía que estaba a salvo.

"Recuerdo cada segundo, la vida ya no será la misma, estoy seguro de que será mejor. Me encontré con la muerte y es la peor sensación que he tenido nunca. Pero estoy vivo y aprovecharé cada segundo de la vida y cada pequeña victoria mejor desde ahora”, relató el galo.

Este fin de semana, en un trazado más corto, que corresponde a parte del Circuito Internacional de Baréin, se realizará el Gran Premio de Sakhir, donde Grosjean no estará por obvias razones.