El artista contemporáneo y disidente chino Ai Weiwei realizó una protesta silente fuera de la corte penal de Londres contra la posible extradición del fundador de WikiLeaks Julian Assange a Estados Unidos, donde enfrenta diversos cargos por espionaje.

Ai, quien ha visitado a Assange regularmente en los últimos años primero en la embajada de Ecuador en Londres y luego en la prisión británica de alta seguridad de Belmarsh, después de que fuera expulsado de la embajada, dijo que las autoridades tienen que proteger la libertad de prensa.

“Está preparado para luchar, pero no es justo para él”, dijo. “Libérenlo, dejen que sea un hombre libre”.

Fiscales en Estados Unidos acusan a Assange, de 49 años, por 17 cargos de espionaje y un cargo de uso indebido de una computadora debido a la publicación en WikiLeaks de documentos militares secretos estadounidenses hace una década. Los cargos implican una sentencia máxima de 175 años en prisión.

Además de argumentar que la extradición implicaría una amenaza contra la vida de Assange, su defensa argumenta que Assange es un periodista y tiene derecho a la libertad de expresión por la publicación de documentos que expusieron delitos del ejército estadounidense en Irak y Afganistán.

“Realmente representa el valor más importante de por qué somos libres, porque tenemos libertad de prensa”, dijo Ai. “Necesitamos protestar mucho y eso puede ser de cualquier forma, yo soy artista, si no puedo usar mi arte es muy limitado, entonces preferiría estar callado”.

El padre de Assange, John Shipton, también estuvo en la protesta fuera de la corte de Londres.

“Ai Weiwei es un artista de importancia internacional enorme, está de pie junto a Julian para darle un significado internacional a la lucha”, dijo.

Ai, de 63 años, es famoso en el mundo por obras como sus instalaciones de bicicletas y de semillas de girasol. En China ha sido impulsado, tolerado y a la vez acosado. Ha pasado tiempo en detención y también le prohibieron por años salir del país. Fue arrestado en el aeropuerto de Beijing en 2011 y detenido por 81 días sin una explicación durante una redada contra disidentes que coincidió con los levantamientos de la Primavera Árabe. Ahora vive entre Berlín y Gran Bretaña.

El caso de Assange ha tenido el apoyo de importantes figuras como la diseñadora Vivienne Westwood, la actriz Pamela Anderson y la rapera MIA. Se espera que la audiencia para su extradición, que se aplazó por la pandemia, termine esta semana.