SOCHI.- Lewis Hamilton ha establecido muchísimos récords en la Fórmula Uno, pero ninguno serán tan significativo como el que podría igualar el domingo en el Gran Premio de Rusia.

Una victoria de Hamilton en el Parque Olímpico de Sochi dejaría al británico empatado con Michael Schumacher, con un total de 91 victorias de por vida, la máxima cifra en los 70 años de historia de la F1.

También incrementaría la abrumadora ventaja de 55 puntos sobre su compañero de Mercedes Valtteri Bottas en la clasificación de pilotos, acercándole a un séptimo título mundial y así igualar otro récord de Schumacher.

La historia es cómplice de Hamilton. Ha ganado cuatro de las seis ediciones del GP en Rusia que se han disputado hasta ahora, y las seis han tenido a un piloto de Mercedes en lo más alto del podio.

Quizás el único que le pueda hacer sombra es Bottas, quien doblegó a Hamilton en la edición de 2017 en Sochi, para conseguir la primera victoria de su carrera.

Entre ambos, Hamilton y Bottas han monopolizado la pole en cada carrera este año. Tampoco sea una ventaja definitiva en Sochi, ya que la larga recta tras la primera curva facilita los rebasamientos.

Hamilton no sólo tiene en la mira los récords en la pista. Se encargó de anunciar el jueves los integrantes de una comisión que gestó en junio para buscar que el automovilismo deportivo sea más diverso, incluyendo a personalidades de los campos de ingeniería, educación y política. Hamilton es el codirector de la comisión.

“En la F1, nuestros equipos son más grandes que los pilotos al volante, pero la representación es insuficiente en cada nivel — de los talleres hasta los ingenieros en las fábricas y departamentos de diseño. El cambio es lento, y tenemos que identificar el motivo", dijo Hamilton.

La carrera de Sochi tendrá la presencia de público en las gradas más numerosa en lo que va de una temporada afectada por la pandemia.

Los organizadores dijeron que se agotaron los boletos para el fin de semana, pero no divulgaron cifras.

El promotor Alexei Titov dijo a la televisión rusa que las gradas estarán al 50% de su capacidad, lo que equivaldría a unos 30 mil espectadores.

Ello excederá con creces al tope previo, los 3 mil que pudieron ver la última carrera: el Gran Premio de la Toscana en el circuito de Mugello.