Un joven de Florida contrajo el coronavirus tras reunirse con amigos y contagió posteriormente a sus padres y a sus dos hermanos, informan esta semana medios estadounidenses. 

A principios de junio, el joven, residente de Plantation, una ciudad del área metropolitana de Miami, salió con sus amigos a pesar de las protestas de su madrastra. "No es el momento", le decía la mujer, pidiéndole que pensara en su padre, quien tenía mayor riesgo de desarrollar COVID-19 grave al padecer de diabetes y de obesidad.

Sin embargo, el muchacho no tomó en serio la amenaza y salió con sus amigos, y aunque al principio llevaba puesta una mascarilla, luego se la quitó para comer y beber con ellos.

Unos días después, empezó a sentir síntomas de resfriado, pero no pensaba que podía haber contraído el nuevo coronavirus. Incluso cuando una de sus amigas, que había estado con él en la misma reunión, le dijo que dio positivo en la prueba del COVID-19, el muchacho no se mostró excesivamente preocupado.

Sin embargo, poco después, los miembros de su familia empezaron a enfermar uno a uno y dieron positivo por coronavirus. El primero en caer enfermo fue su hermano de 14 años, quien, igual que su padre, padece de sobrepeso. Mientras hermana de 6 años solo tuvo mucosidad nasal, su madrastra experimentó fiebre, escalofríos y dolores, pero la peor parte se la llevó su padre.

John Place, de 42 años, tuvo que ser hospitalizado después de cuatro días de fiebre y tos constante y ya lleva tres semanas en el hospital. Mientras que el resto de miembros de la familia permanecieron aislados en casa, el hombre estuvo más de dos semanas conectado a un ventilador mecánico.

Este lunes, su mujer dijo a una cadena local que su esposo estaba luchando contra una neumonía y una hemorragia interna. 

Al mismo tiempo, los amigos de la familia lanzaron una campaña para recaudar fondos con los que ayudar a pagar las enormes facturas del hospital, ya que el negocio de fotografía instantánea que posee la pareja quedó muy afectado económicamente a causa de la pandemia.

Esta semana, Florida superó los 300.000 casos confirmados de coronavirus y cada día registra más de 100 fallecidos. En los últimos días, la tasa de mortalidad se triplicó en comparación con el mes pasado. En total, el estado, que tiene más de 20 millones de habitantes, acumula más de 4.800 muertes relacionadas con el COVID-19.