El homicidio y lesiones serán considerados como delitos calificados y acarrearán penas de hasta 45 y 21 años de prisión, respectivamente, cuando se cometan contra personal de salud.

A raíz del incremento en las agresiones contra personal de la salud en el país por prejuicios relacionados a la contingencia por el COVID-19, el Congreso de Coahuila aprobó ayer reformas al Código Penal del Estado para endurecer los castigos contra quienes cometan delitos contra personal sanitario, instalaciones hospitalarias y vehículos del sector salud.

“Proponemos incluir en los delitos de lesiones calificadas y homicidio calificado, cuando se cometa en contra de personas que desempeñan algún cargo, profesión, oficio, o actividad relacionada con la prestación de servicios de salud, es decir, no solo el personal médico, sino enfermeras, personal de laboratorio, camilleros, etc. que con motivo del ejercicio de sus funciones, atenten contra su integridad física”, señala la iniciativa que dio origen al dictamen aprobado ayer.

Con el nuevo esquema, el delito de homicidio doloso cometido contra personal de la salud, tendrá una pena de entre los 25 y los 45 años de cárcel, mientras que de causar lesiones graves, serán entre 9 y 21 años de prisión.

También se fijó una penalidad de hasta 2 años de prisión en el delito de discriminación por odio, vejación o exclusión, cuando se realice en contra de personal de salud, durante una emergencia sanitaria declarada por autoridad competente.