No hay duda de que el cierre de la economía ocasionado por el COVID-19, ha causado para todos un gran sufrimiento social y económico. Todos esperamos una reapertura oportuna para comenzar a aliviar la tensión. Y es que cuanto más tiempo permanezcamos cerrados, más difícil será echar a andar la economía.

Los trabajadores han agotado sus ahorros, y muchas empresas no sobrevivirán. Hoy, la pérdida de empleos en México y en Coahuila se cuenta ya por miles. Aún así, una apertura económica prematura podría aumentar la crisis. ¿Por qué es eso? Creo que podemos entender esta situación al observar las decisiones que han tomado otros países. Imagine que hace 40 días, en el pico de la crisis por COVID-19, España, Italia o Inglaterra hubieran decidido abrir su economía el lunes siguiente del pico máximo de muertes y contagios.

Ahora piense en que si reabrimos mientras permanecen los riesgos para la salud, como sucede ahora, las consecuencias de tener que empezar otro confinamiento y cerrar la economía por segunda vez, serán mayores y las consecuencias económicas de tal escenario, terribles y más perjudiciales que un solo confinamiento más largo, ya que todos tendremos que volver al encierro si la curva tarda aun más en bajar.

Una segunda ronda de cierres masivos, probablemente significará que las empresas se vean afectadas y la economía sufra. Eso significa más tiempo con altas tasas de desempleo, que en un país como México se puede convertir en una crisis de seguridad nacional.

Además, tal probabilidad haría que los esfuerzos futuros de recuperación sean aún más vacilantes y tenues. La recuperación de empleos se volverá más lenta que ahora y quizás algunos empleadores serán más reacios a abrir y volver a contratar nuevamente.

Luego están los negocios del sector de servicios, que ante un abrir y cerrar, se encontrarán con pocos clientes que se sientan seguros como para frecuentar sus tiendas, salones de belleza, restaurantes, bares y cines. Estas empresas se beneficiaran poco de la reapertura y podrían no ser capaces de cubrir los costos de permanecer abiertos.

En tercer lugar, y con mucho el mayor riesgo, es que el virus comenzará nuevamente a propagarse rápidamente, generando una segunda o tercera oleada de infecciones más grandes que la primera. Por supuesto, el costo humano de este resultado sería enorme.

Aun así, los expertos creen que cualquier reapertura económica tendrá que ocurrir en un marco de prueba y error y sobre todo, dependerá de cuán cuidadosamente las personas cumplan con los protocolos de distanciamiento social. Pero no olvidemos que más contagios también significa la posibilidad de más muertes.

La publicación del semáforo de reapertura del gobierno del presidente Andrés Manuel López Obrador no dejó contento a muchos gobiernos locales, como fue el de Coahuila, en donde el gobernador Miguel Riquelme en ausencia de un claro mandato federal, está adoptando diferentes enfoques sobre la velocidad y el ritmo de la reactivación económica. Si las cosas resultan bien, de él será el crédito. Eso lo deseamos todos, porque necesitamos volver al trabajo… pero con la tranquilidad de que es un riesgo calculado que beneficiará en lugar de dañar nuestra salud y economía.

No olvidemos que al COVID-19 no le importan los planes de los políticos, sus aburridas reuniones, conferencias de prensas y hasta arrebatos. El virus va a ser siempre el virus y no le importa lo que hagamos. El virus no lee las noticias, no sigue las reglas, no respeta nada. Así que también, si esta acelerada reapertura de la economía no resulta y se pierden más vidas de coahuilenses, también sabremos quién puso mucho de su parte para que eso sucediera. El gobernador Riquelme esta quizás, ante la decisión más difícil de su mandato y yo espero que por el bien de todos, las cosas funcionen.

P.D. La llegada del abogado José Guadalupe Martínez Valero a la dirección del Centro de Medios Alternos de Solución de Controversias del Poder Judicial de Coahuila es destacable por su historia personal. Poner orden y dejar atrás el negro legado de los incondicionales de Gregorio Pérez Mata que tanto daño hicieron a la justicia en el estado son desde ahora su reto. Estoy seguro que Martínez Valero honrara a la justicia en Coahuila.

@marcosduranf