La inflación a consumidores desaceleró, en abril, a su menor nivel desde diciembre del 2015, en medio de la pandemia del Covid-19 que generó el cierre temporal de algunos negocios en el país, así como la disminución del precio internacional del petróleo. 

El Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi) dio a conocer que el Índice Nacional de Precios al Consumidor (INPC) registró una disminución de 1.01% en comparación mensual, con lo que a tasa anual se ubicó en 2.15% desde el registro del mes previo de 3.25 por ciento.

De esta manera, los precios al consumidor registraron su menor nivel desde diciembre del 2015, cuando se ubicaron en 2.13 por ciento.

La desaceleración de la inflación está vinculada a una disminución de los precios de energéticos y algunos productos agrícolas.

La inflación subyacente -que excluye a los bienes y servicios más volátiles, como los agropecuarios y los energéticos y las tarifas del gobierno- a tasa anual se ubicó en 3.50%, mientras que la inflación no subyacente cayó 1.96%.

En su comparación mensual, la inflación general descendió 1.01% respecto a marzo; la subyacente subió 0.36% y la no subyacente se contrajo 5.17%.

Entre los productos que presentaron un descenso más profundo en sus precios están la gasolina de bajo y alto octanaje, con caídas de 17.35% y 15.89%, respectivamente; el jitomate, con una baja de 31.33%; la electricidad, con un retroceso de 12.24%, y el tomate verde y el pepino, con disminuciones de 33.30% y 20.92%, cada uno.