El titular de la Secretaría de Gobierno de Coahuila, José María Fraustro Siller, dio a conocer que sostuvo una orientación con la consultora McKinsey, para combatir y aminorar los efectos económicos que podría traer la emergencia de COVID-19 a la entidad.

A través de sus redes sociales, el Secretario de Gobierno dio a conocer los motivos por los cuales sostuvo contacto de forma virtual con la empresa que en 2019 colocó a Saltillo como una de las cuatro mejor posicionadas en nivel económico en México.

Esta empresa ha firmado contratos con la familia real en Arabia Saudita y su consultoría ha sido empleada por Nuevo León.

POLÍTICA DE MIGRACIÓN

Además formó el proyecto anti migratorio entregado al gobierno de Donald Trump, que de acuerdo con Pro Publica y The New York Times, se basaba en recortar gastos en la garantía de los derechos de la población migrante e interrumpir sus procedimientos en procesos de detención realizados por el Immigration and Customs Enforcement’s (ICE) y Customs and Border Protection (CBP), haciéndolos acelerados.

Fue en diciembre de 2019, que New York Times y Pro Publica revelaron que esta agencia había obtenido el poder del diseño de la política pública migratoria empleada por Trump y que fue reiterativa en su campaña; misma que tuvo contratos firmados por 2.2 millones de dólares.

“McKinsey ha enfrentado un escrutinio cada vez mayor en los últimos dos años porque el Times, Pro Publica y otros medios han cuestionado si la empresa ha rebasado los límites éticos y legales en busca de rentabilidad”, escribió el New York Times.

En el mismo artículo, el Times reveló que esta empresa era objeto de una investigación penal en el país vecino, que intentaba determinar si violó las normas de la bancarrota, al negar que existían actos indebidos en los casos de consultoría, aunque se disculpó por errores cometidos en Sudáfrica.

A LO QUE SE DEDICAN

Al arrancar marzo, nueve de cada 10 empresarios en el mundo identificaron al brote del coronavirus como un reto para la economía mundial. Pero solo 2 de cada 10  ejecutivos de América Latina, veían al COVID-19 como un desafío para el desempeño económico, reveló la encuesta de Condiciones Económicas conducida por la consultoría de negocios McKinsey & Company.

Entre los empresarios de Latinoamérica, merecían mayor preocupación las políticas domésticas, con el 51% de las respuestas; y la lenta recomposición de las cadenas de valor desde China, para el 43% de los ejecutivos.