A través de un nuevo Código de Ética para los Servidores Públicos, la Secretaría de Fiscalización y Rendición de Cuentas busca fomentar el rechazo a la corrupción y la impunidad, además que obliga a los empleados a informar por escrito a sus superiores en caso de conflicto legal o de intereses, para que se abstengan de tomar parte.

El nuevo Código abroga el creado con el decreto número 51 del pasado 25 de junio de 2013, el cual fue aplicado en la administración estatal anterior, y que era de ética y conducta.

En su artículo cinco se señala que los servidores públicos del Estado deberán regirse a través de propósitos institucionales como el bien común, la confianza ciudadana, la participación ciudadana, el combate a la corrupción y el combate a la impunidad.

Los principios que regirán al Código son la legalidad, la honradez, la lealtad, la imparcialidad, la eficiencia, la eficacia, la honestidad, la integridad, el liderazgo, la rendición de cuentas, la transparencia y el respeto.

En el artículo 11 del Código se explica que los servidores públicos al iniciar el empleo, cargo o comisión, dentro de la administración estatal deberán suscribir una carta compromiso, en la cual se comprometen a desempeñarse con los principios y valores establecidos en el Código.

Se les pide los servidores públicos que cuando conozcan de un hecho contrario a las disposiciones del Código lo enteren a sus superiores, al Comité de Ética de cada institución o bien al órgano interno de control.

En el artículo 14 se señala que si un servidor público, tiene conocimiento de un asunto en el cual exista conflicto de interés o impedimento legal, deberá informar por escrito a su superior.