La capital coahuilense vivió un sábado totalmente extremo con el rugir de los motores en el Centro Histórico. Pilotos de 11 nacionalidades diferentes hicieron vibrar y engalanaron a los miles de espectadores con acrobacias que lucieron por los aires. Familias enteras acudieron a la cita, el ambiente se tornó inmejorable y el clima jugó tregua perfecta para que el evento fuera totalmente agradable.

Un intenso sol abrazó la tarde, mientras los saltillenses arribaban al corazón de la ciudad, el termómetro rondó los 32 grados centígrados, pero nada evitó que la afición esperara con ansias el inicio. Las calles de Miguel Hidalgo, Benito Juárez e Ignacio Zaragoza lucieron verdaderamente abarrotadas, apenas se pudo caminar entre la muchedumbre que buscó refugio en alguna sombra.

Posterior a la firma de autógrafos, fue cerca de las 18:15 horas cuando los primeros motociclistas salieron a escena en la disciplina del mototrial por parejas. En esta modalidad los pilotos debieron superar distintos obstáculos delimitados en un circuito específico, el cronómetro fue el rival a vencer. Pantallas gigantes permitieron que la actividad se pudiera ver desde distintos puntos de Plaza de Armas.

Mientras la tarde caía la emoción se incrementaba, el clímax se dio cuando llegó el momento de que los protagonistas desafiaran a la gravedad. El freestyle motocross acaparó los reflectores, sin importar género o edad, la sorpresa y adrenalina se vieron reflejados en los rostros de los presentes. La ilusión en los niños fue evidente.

Los jinetes pusieron a prueba sus capacidades acrobáticas buscando cautivar a los jueces y por supuesto, ganarse el aplauso de la afición. La postal de la Catedral lució perfecta para completar el espectáculo, el nerviosismo y la adrenalina estuvieron latentes, pues las dos rampas instaladas se mostraron desafiantes esperando a ser abordadas. Una rampa se ubicó en la calle Hidalgo y la otra en Allende.

Un total de 16 pilotos conquistaron los aires, originarios de México, Estados Unidos, Canadá, República Checa, Japón, Francia, Chile, Venezuela, Irán, Noruega y España.

En cuanto a seguridad, prácticamente en cada esquina se pudo ver a un grupo de uniformados, también se contó con puntos de auxilio, centro de mando y objetos perdidos. Durante el evento se exhibieron diversos vehículos todoterreno y motocicletas, con los que el público pudo tomarse la fotografía del recuerdo.

Dado al éxito del evento extremo, mismo que fue organizado y corrió por cuenta del Gobierno Municipal de Saltillo, se espera que puedan darse próximas ediciones que conquisten la pupila saltillense.