El niño migrante de dos años que fue abandonado en una tienda de la colonia 15 de abril durante una persecución de policías de la Fiscalía General del Estado a un grupo de centroamericanos en Saltillo fue retornado ayer a El Salvador su país de origen, a través del Instituto Nacional de Migración.

Mediante un comunicado la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Coahuila informó que en todo momento el menor fue protegido y resguardado por los protocolos de la Procuraduría de los Niños, las Niñas y la Familia y en el proceso de repatriación se contó con el pleno consentimiento de la madre para que regresara a su país de origen sin riesgos a su vida ni integración física.

La Comisión argumenta que en todo momento exigió que en el proceso se cumplan con los estándares nacionales e internacionales de protección al menor.

Mientras tanto, la niña de 8 años y que vio morir a su padre tras los impactos de bala que desató un elemento de la corporación, permanece al resguardo de la Procuraduría de los Niños, Niñas y la Familia, en tanto se realizan las gestiones de su retorno a Honduras junto a su tío y el cuerpo de su padre Marco Tulio “N”.

‘AL QUEDAR BAJO CUSTODIA SE CONTACTÓ A LA MADRE’

Se aclaró que desde que la menor quedó bajo la custodia de la Pronnif se contactó con la madre quien habita en Honduras a quien se le informó de los hechos y del estado de la pequeña, todo con la asesoría y acompañamiento de la presidenta de la Comisión Ejecutiva Estatal de Víctimas.

Sin embargo, al confirmarse que un tío de la menor, se encontraba en la Casa del Migrante se comenzó a gestionar el que este pudiera visitarla diariamente, al momento se realizan las gestiones ante el Instituto Nacional de Migración para el retorno a su país de ambos así como del cuerpo de Marco Tulio “N” el padre de la menor.

“En este proceso de retorno se cuenta con el pleno consentimiento de la madre y del tío de la menor, con asistencia de sus asesores jurídicos de la CEAV Coahuila” menciona el comunicado.