La fuerza de Guadiana
Usted está aquí
La fuerza de Guadiana
Bajo la premisa de que su intervención iba a ser segura para que la Comisión Federal de Electricidad adquiriera el carbón coahuilense, el senador se trepó sobre una atribución que no le corresponde queriendo ganarle la carrera al gobernador quien finalmente condujo la negociación con éxito.
Queda claro que con el propósito de ganar la plaza Armando Guadiana está aprovechando las relaciones que tiene con Andrés Manuel López Obrador y la estructura burocrática, disfrazando su actividad con el señuelo de buscar solución a problemas de Coahuila, mediante la irrupción en las esferas de poder sobre todo las del aparato del Ejecutivo Federal, y conseguir que las medidas partan desde Palacio Nacional en forma unilateral.
La innegable influencia del senador cada día va acumulando confianza en el ambiente político con miras a hacerse presente en las elecciones que se irán dando en nuestro territorio, haciendo valer su opinión para designar candidatos y ver la forma de ganar escaños locales y federales, pero principalmente en el sitio más importante de la estructura estatal, es decir, la gubernatura que peleará para morena, -con él o sin él como candidato- partido que logró introducir en Coahuila y que por esa apertura conseguida la gente confía en él.
El senador Guadiana ha echado mano de una exposición política sin tregua, pues ha aceptado de buen modo el nicho que los medios le han puesto a su disposición para hacerse notar, lo mismo logra con las redes sociales mediante entrevistas presenciales, en fin, no malgasta ninguna oportunidad para seguir en la mente de los coahuilenses y lograr a futuro la aprobación de los electores plantando a Morena como un partido político esperanzador y solucionador de las causas populares, lo que le darían la fortaleza necesaria para meter mano en los procesos electorales y constituirse como el poder tras el trono.
Diga si no, hace unos días subió a las redes sociales una noticia según la cual, mediante su intervención, la Comisión Federal de Electricidad había autorizado la compra de 360 mil toneladas de carbón, mineral extraído de los yacimientos enclavados en la región carbonífera del Estado, con las que se verían beneficiados miles de carboneros, situación que aliviaría las dificultades por las que atraviesan junto con sus familias.
Sin embargo, señor senador, usted debe ser consciente de que el que legalmente representa al Estado de Coahuila es el gobernador Miguel Ángel Riquelme y por lo tanto es él quien debe solucionar el asunto del carbón, ya que son atribuciones que por ley le son otorgadas, tan es así que el propio Manuel Bartlett, director general de la Comisión Federal de Electricidad, se vio en la necesidad de desmentir sus declaraciones de que había conseguido las autorizaciones para la compra del mineral quedando en desprestigio, sin embargo a los pocos días, con la intervención del gobernador, la decisión verdadera fue anunciada con todas las circunstancias de veracidad.
Creo que las acciones que está tomando el senador Guadiana son atropelladas al querer sustituir las facultades que le corresponden al gobernador, pues las atribuciones de senadores y gobernador están perfectamente definidas en las Constituciones, federal y local, y por más coadyuvantes que sean le corresponden atenderlas al Ejecutivo del Estado, pues de lo contario sería faltarle al respeto a una autoridad legalmente constituida y ocasionar fisuras en las relaciones entre los dos niveles de gobierno que hasta ahora son buenas.
Lo más sano para ayudar sin distorsiones a la solución de los problemas, es que diputados federales y senadores, que se supone que trabajan para los ciudadanos no para partidos, brinden irrestrictamente apoyo a la labor que por ley le corresponde al gobernador en lugar de querer medir fuerzas.
Las fuerzas se miden realizando tareas que sustentadas en disposiciones legales miren por el bien de los habitantes de la ciudades, sin tratar de encaramarse en el trabajo que debe desempeñar otra línea de mando.
Los caprichos políticos deben erradicarse, pues todavía hay quién los aprovecha valiéndose de los ciudadanos al utilizarlos como carnada.
Se lo digo EN SERIO.
franciscoaguirreperales@gmail.com
@aguirreperalesf