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La PGR sabía desde 2012 de colusión de funcionarios en 'huachicoleo'
Registros de la Procuraduría General de la República (PGR) revelan que tan sólo en el estado de Veracruz inició 980 averiguaciones previas de enero de 2012 a octubre de 2018 por el delito de sustracción ilícita de hidrocarburos, y de junio de 2016 a octubre de este año abrió 994 carpetas de investigación, y que la mayor parte de éstas no llegaron a procesos penales, a pesar de que en algunos casos se descubrió que empleados vinculados con grupos del crimen organizado –como el cártel del Golfo y el cártel Jalisco Nueva Generación(CJNG)– participaban en el robo de combustible y hasta en la instalación de tomas clandestinas dentro de refinerías y centros de almacenamiento.
Asimismo, se señala que en uno de estos casos la Subprocuraduría Especializada en Investigación de Delincuencia Organizada (Seido) tuvo conocimiento del robo de 16 mil litros de diversos combustibles en los municipios de Boca del Río y Xalapa, así como de la sustracción ilícita de 43 toneladas 371 kilos de polietileno –material de alta rentabilidad que se utiliza para la producción de tuberías y recubrimiento de cables, entre otras utilidades–, entre los registros más relevantes de sucesos reportados entre 2012 y 2018.
En tanto, la delegación de la PGR en Veracruz fue notificada del robo de 766 mil 485 litros de hidrocarburo en 746 hechos ocurridos en 40 municipios de esa entidad en el mismo lapso.
Hurtos en plantas
La PGR y Petróleos Mexicanos (Pemex) indican –de acuerdo con información proporcionada en respuesta a solicitudes de información pública– que de las plantas que se localizan en el estado de Veracruz, la empresa reportó el desvío de petróleo crudo y otros combustibles que eran cargados en el interior de la estación de recolección y bombeo conocida como E-1, que se localiza en el municipio de Ébano, Veracruz, en autotanques con capacidad hasta de 30 mil litros.
De la misma manera, un informe interno de Pemex detalla el descubrimiento de operaciones en las que se simulaban descargas de petróleo crudo recién extraído que llegaba de las áreas de pozos a las instalaciones de Pánuco en carros tanque.
Una pipa de 30 mil litros fue colocada en el área de descarga E-41, y supuestamente se descarga en menos de siete minutos, esto sin abrir totalmente las válvulas de desfogue del tanque y sin colocar la manguera de forma correcta. Luego, la unidad fue llevada al kilómetro 91.5 de la carretera Ciudad Valles-Tampico, y allí el crudo fue trasvasado a otros vehículos.
La información indica que estas operaciones fueron monitoreadas tanto por autoridades de Pemex como por representantes de la Seido y se inició la averiguación previa AP/PGR/VER/PAN-11-0116/2014, sin que se fincaran responsabilidades en contra de empleados de Pemex o trabajadores de empresas privadas.
Complicidad y rivalidades
En marzo de 2015, el Ministerio Público Federal inició la indagatoria AP/PGR/VER/PAN/I/020/2015 y esa ocasión fueron arrestadas nueve personas, se incautaron dos autotanques, tres camionetas y 84 mil litros de combustible. Por este hecho se inició proceso penal en contra de los nueve detenidos (cuatro eran empleados de Pemex y todos estaban relacionados con integrantes del cárteldel Golfo).
Se descubrió que el combustible era entregado a empresas localizadas en los estados de Querétaro, San Luis Potosí y Guanajuato, pero ya no se menciona el seguimiento que se dio a la averiguación previa.
En el caso de los carros tanque que eran llevados con hidrocarburos obtenidos de manera ilícita, el Ministerio Público Federal estableció que la zona de Guanajuato estaba bajo el control de Antonio Yépez Ortiz, El Marro, ex integrante del CJNG y dirigente de lo que ahora se conoce como el cártel de Santa Rosa de Lima, que se disputa el control del robo y venta ilegal de combustible en la zona del Bajío, con la organización de la que formaba parte y que dirige Nemesio Oseguera Cervantes, El Mencho, uno de los narcotraficantes más buscados en México y Estados Unidos.