Nueva Rosita, Coah.- La región Carbonífera de Coahuila, todavía no se encuentra preparada para para la llamada descarbonización, porque el 70 por ciento de los empleos que se generan actualmente dependen de la extracción de carbón, en la que se generan más de 10 mil empleos directos e indirectos, consideró el empresario Antonio Flores Guerra.

En entrevista, mencionó que, si bien es cierto que México está generando electricidad a través de otras fuentes como es la Eólica o Solar, aun el carbón es la principal para la generación en las plantas carboeléctricas instaladas en el municipio de Nava.

“No estemos preparados como para dejar de generar totalmente la energía a través de otras fuentes, porque todavía no se ha dado la diversificación de la economía, al menos en la región de Sabinas, Muzquiz y San Juan de Sabinas, el 70 por ciento de los empleos o la derrama económica proviene de la explotación de carbón en minas subterráneas o tajos a cielo abierto”, expresó.

Recordó que falta mucho para que México alcance la descarbonización de su economía para el año 2030, de conformidad con los acuerdos adoptados en las Conferencias de las Partes de la Convención Marco de las Naciones Unidas sobre el Cambio Climático.

Dijo que, desde el senado, se han solicitado los mecanismos o planes de contingencia que garantizarían el bienestar y desarrollo económico de las familias de la región carbonífera del país, que dependen de la extracción del combustible fósil, pero hasta ahora no se ha logrado avanzar sobre el tema.

“México se integró a la Alianza contra el Carbón, que a través de la Plataforma 2050, los 26 países integrantes se comprometieron a descarbonizar su economía a mediados de siglo, además de impulsar a la iniciativa privada para que mueva sus activos hacia opciones neutras en emisiones, pero falta mucho por avanzar para que esto se dé”, agregó.

Para para que esto se dé -añadió-, requiere acciones que lleven a un horizonte bajo en carbono, porque hacen falta políticas públicas y marcos regulatorios claros que den una señal a los inversionistas para que empiecen a planificar sus negocios de cara a un cambio de estrategia hacia inversiones limpias.

“La decisión de México de sumarse a las plataformas y alianzas por la descarbonización, representan un reto a nivel social, económico y ambiental, ya que nuestro país posee una región carbonífera que representa una importante fuente de empleo para miles de familias”, afirmó.

Finalmente expresó que, por ello, es necesario destacar los mecanismos, planes o estrategias con las que el gobierno mexicano propone alcanzar la descarbonización de su economía en 2030, y asegurar el desarrollo económico de la Región Carbonífera del país y el bienestar de las familias que dependen de esta actividad extractiva.