El grupo parlamentario del PAN solicitó a la Auditoría Superior del Estado y a la Secretaría de Fiscalización y Rendición de Cuentas un informe con los motivos por los que no se percataron de los pagos a empresas fantasmas por parte del Gobierno del Estado en el 2016.

La diputada Blanca Eppen pidió a ambos organismos que informen el grado de responsabilidad que tuvieron los órganos de control interno y los servidores públicos en general que tenían la responsabilidad de supervisar el comportamiento de las transacciones del Gobierno del Estado a sus proveedores.

“Tanto la Secretaría de Fiscalización y Rendición de Cuentas como las personas encargadas, debieron de percatarse, por lógica, de que empresas irregulares estaban accediendo a contratos de la administración pública. Los órganos de control dentro de las dependencias contratantes debieron hacer lo propio, pero no sucedió así, estas empresas  pudieron operar con total libertad e impunidad, sin que nadie detectara, curiosamente, ninguna irregularidad con ellas”, indicó.

Señaló que el órgano interno de control tiene la facultad de supervisar, vigilar y verificar que se cumpla la ley en todo momento y detectar irregularidades, en este caso, en las operaciones de contratación de productos, servicios y obras públicas. 

 “¿Qué sucedió con los órganos de control, y con la propia Secretaría de Fiscalización y Rendición de Cuentas, durante los años en que operaron con total impunidad las llamadas empresas fantasma? ¿Por qué no detectaron a los proveedores irregulares? ¿Por qué no aplicaron los controles preventivos establecidos en la Ley de Adquisiciones, Arrendamientos y Contratación de Servicios del Estado?”, cuestionó la legisladora.