A 50 años del movimiento estudiantil de 1968, la Arquidiócesis de México consideró que las exigencias de los estudiantes se mantienen vigentes y llamó a atender las necesidades de la juventud.

“Los ideales de aquel entonces están vigentes para todos los actores y para cada instancia social, sea política, mediática, educativa, religiosa, cultural y nadie puede ignorar las necesidades de los jóvenes, puesto que ellos siempre serán el futuro que viene, que necesita cuidado, que merece prioridad”, expuso.

Los jóvenes 50 años después del 2 octubre es el título del editorial publicado en el semanario religioso Desde la Fe, donde afirmó que la fecha conmemorativa siempre tiene peso, porque “fueron estudiantes los protagonistas centrales de los acontecimientos de hace 50 años”.

El artículo retomó las veces en que los pontífices se han dirigido a los jóvenes y enfatizó en el inicio del sínodo por sus trabajos en los jóvenes, la fe y el discernimiento vocacional: “Son muestra del interés y atención que la Iglesia sigue manifestando a tan importante sector de la sociedad”.

Recordó el documento Evangelii nuntiandi (Paulo VI) sobre la evangelización en el mundo contemporáneo, las catequesis juveniles de septiembre de 1978 con Juan Pablo I, las Jornadas Mundiales de la Juventud, con Juan Pablo II, el carisma que atrajo a millones de jóvenes en Colonia 2005 y en Madrid 2011 el papa Benedicto XVI, la renovación del papa Francisco, y aseguró que confirman lo que se sigue haciendo en parroquias, grupos juveniles, voluntariado, misiones, colegios y de jóvenes.

“Quien sea capaz de leer en profundidad los diversos mensajes y documentos, así como las actividades pastorales en las más distantes latitudes y circunstancias, podrá corroborar que el trabajo de la Iglesia está enfocado en los jóvenes”, aseguró.

El texto concluyó que los jóvenes de hace 50 años y los de la actualidad exigen atención y cuidado de la Iglesia y de diversas instancias sociales: “Hay que reconocer que la Iglesia ni está lejos de ellos ni los excluye, ya veremos el resultado del Sínodo de los Obispos, en donde los jóvenes son protagonistas”.

Al presidir la homilía dominical en sustitución del cardenal Carlos Aguiar Retes, quien se encuentra en el Vaticano, el canónigo de la Basílica de Guadalupe, Jorge Antonio Palencia Ramírez, lamentó que en la Ciudad de México existan leyes en favor de la interrupción legal del embarazo y del dolor.

“Ahí están las últimas leyes de esta ciudad que han sido propiciadas por movimientos sociales y políticos, que apoyan el aborto y el desconectar a los enfermos. Esos son asesinatos asistidos”.

En su discurso litúrgico dijo que en la actualidad hay grupos que aseguran que se considera a alguien un ser humano hasta tantas semanas de embarazo: “Están esas leyes que dicen que empieza a ser humano en la semana 19 o 23 y así los transformamos de cosa en persona, cuando el plan original de Dios es tener un alma desde la concepción”.