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Presentarán en Saltillo ‘Mi padre, El Inmortal’
No se puede concebir el beisbol cubano sin la presencia de Martín Dihigo, considerado por muchos el beisbolista más completo de todos los tiempos.
Parte de su legado estará presente en Saltillo, el próximo lunes 25 de junio en punto de las 20:00 horas, con la presentación del Libro “Mi padre, El Inmortal” en las instalaciones del Club Saraperos de Saltillo.
El libro fue escrito por el hijo del pelotero, Gilberto Dihigo, cubano residente en Florida, Estados Unidos, quien estará en la presentación.
Además del hijo del pelotero, la leyenda de la crónica, Enrique Kerlegand, y el licenciado Juan Antonio García Villa, completan la tercia de “Ases” que presentarán el libro biográfico ante los saltillenses.
Martín Dihigo nació en Matanzas, Cuba, el 25 de mayo de 1905 y se hizo famoso como lanzador, sin embargo, fue estrella en todas las posiciones.
Dihigo inició su carrera en Cuba en 1922 como infielder en la liga cubana.
En 1937 llegó a la Liga Mexicana con los Rojos del Águila de Veracruz, donde consiguió la triple corona gracias a su poderoso lanzamiento.
Durante los inviernos, Dihigo jugó en las ligas profesionales de Cuba, la República Dominicana y Venezuela. Fue elegido al Salón de la Fama del Beisbol de cada uno de estos países, y también a los salones de México y de los Estados Unidos, siendo la única persona que ha logrado estar en cinco Salones de la Fama diferentes.
El pelotero murió el 20 de mayo de 1971, sin embargo, su legado quedó en la memoria de todos los amantes del beisbol.
En poco más de 400 páginas, Gilberto desgrana la historia de quien fuera considerado el jugador más completo de su generación, pero descubre, especialmente, ese lado humano que el mito deportivo cubrió por completo.
DATOS
1938 año en que logró la proeza de ser líder de los bateadores de la Liga Mexicana con el Águila de Veracruz con .387 de porcentaje.
18 juegos ganados, 2 perdidos, 184 ponches propinados y una efectividad de 0.90 en carreras limpias por juego le dieron la triple corona.
1942 fue el año en que repitió la hazaña como el mejor lanzador, pero esta vez con Unión Laguna (22-7; 211 ponches y 2.53 PCL).