Nadie sabe para quién trabaja. Un hippie alemán aprovechó la casa abandonada del exjugador de tenis, Boris Becker, en Mallorca, España para crear un comando intergaláctico de socorro y salvamento. 

Todo esto es con el objetivo de darles una nueva vida a las casas abandonadas.

De acuerdo a The Sun, Georg Berres, ha vivido en varias casas abandonadas y ahora eligió la mansión mallorquina que Boris Becker compró en 1995 y que cuesta, aproximadamente 15 millones de euros.

En 2007 el extenista trató de vender la casa, pero no logró recibir una propuesta que satisficiera su demanda de 13 millones de libras. En 2017 Boris Becker se declaró en quiebra.

"No ocupamos las casas, las salvamos, no hacemos reclamaciones de la propiedad, solo nos preocupa vivir en una mansión con renta gratis y devolverle algo a la casa", dijo Berres en una entrevista con revista Mallorca Zeitung. 

No se han presentado quejas ni reclamaciones, pero la policía podría desalojarlo en caso de que comiencen las llamadas para pedir apoyo.