Bertila Paredes, del Comité de Familiares Migrantes Desaparecidos, informó durante el Foro Nacional para la Implementación de la Ley General de Desaparición Forzada, que otra de las graves situaciones que enfrentan los familiares de personas migrantes en Centroamérica, es la desaparición de sus seres queridos en territorio mexicano. 

La integrante del Cofamide, que fue invitada para escuchar lo estipulado en términos de la población migrante dentro de la Ley General en Materia de Desaparición, dice que la Cancillería de El Salvador tiene registros de por lo menos mil 400 personas migrantes de origen salvadoreño, que fueron desaparecidas en el País, pero sobre todo en las rutas de ‘La Bestia’.

Si bien dentro de este registro están contadas personas migrantes que fueron desaparecidas en el desierto, también existen casos seguidos por la Cofamide, de gente de la que se supo por última vez, en el territorio o de Piedras Negras, Reynosa, Nuevo Laredo, San Fernando, y toda la franja de ambas fronteras del país. 

“Este país se ha convertido en la tumba de nuestros migrantes y nuestra familia”, dice la salvadoreña.

DESERTAR DE LA BÚSQUEDA

En ese sentido, Bertila explicó que los problemas para la búsqueda de sus desaparecidos en México se deben a la distancia, la pobreza, y las enfermedades de las familias, por las cuales al final muchas prefieren desertar de realizar acciones. 

“A muchas personas se les hace imposible venir hasta este país a buscar a sus seres queridos. Lo que va sucediendo es que las familias se entristecen, enferman, fallecen o claudican, y muchas veces por eso paran las búsquedas, ya no hay quien busque por eso mismo.

“Nosotros no podemos venir a poner una denuncia hasta acá, y tenemos miedo que nos pase lo mismo”, expresó. 

SON LENTAS LAS AUTORIDADES

En cuanto a la acciones de la autoridad, la salvadoreña dice que las autoridades mexicanas han sido complicadas, y aunque se están realizando muestras de ADN de restos recuperados que se comparten con la cancillería de El Salvador, es una ayuda mínima y que se desarrolla lentamente. 

Bertila dijo esperar que se aplique de manera adecuada la Ley General en Materia de Desaparición, para que se agilicen los procedimientos.