GENERAL CEPEDA, COAH.- El ahora exalcalde de General Cepeda, Rodolfo Zamora Rodríguez, se arrepiente de no “haber negociado correctamente” la instalación del confinamiento de residuos tóxicos ubicado en el ejido La Noria de la Sabina. 

A pregunta expresa sobre cuál fue la obra de la que se sentía orgulloso durante su segundo periodo como Edil de General Cepeda, señaló que el proyecto de los comedores rurales y el de la cabecera municipal brindó alimentación diaria a 400 personas de la demarcación. Sin embargo, reconoció que la obra que no salió como quería fue el confinamiento de residuos tóxicos. 

“Me arrepiento en lo personal de no haber sabido manejar las cosas en su momento en el confinamiento. De primero el proyecto era muy ambicioso porque iba a pasar la carretera por en medio del ejido hacia arriba, iba a ver una clínica. Después se hicieron los problemas y lo que más afectó fue que se politizó mucho por los partidos opositores”, dijo a VANGUARDIA.

“Hubiera negociado bien para que el ejido realmente hubiera tenido un beneficio, que la carretera quedara más cerca del ejido, el agua potable… algo bueno para ellos porque siguen viviendo de la lechuguilla, candelilla, y algunos que van a trabajar hasta Mabe”, dice lamentando la situación. 

Aunque no responsabilizó de manera particular a nadie sobre el otorgamiento de los permisos para la instalación del confinamiento, Zamora Rodríguez aclaró que faltó mejorar la relación entre los tres niveles de Gobierno pues “a veces llega el Gobierno Federal, hace una obra y ni cuenta nos damos”, agrega. 

“Yo creo que faltó tener más acercamiento entre el Gobierno Federal, Estatal y Municipal para la realización de las obras, porque como Municipio se nos tiene que tomar en cuenta en todo porque somos un mismo Gobierno”, señaló el exedil de extracción priista. 

Al reconocer la molestia de los pobladores del ejido La Noria de la Sabina, se justificó al decir que cuando él llegó a la administración prácticamente ya estaba todo el trámite listo para la instalación del confinamiento propiedad de la empresa Sociedad Ecológica Mexicana del Norte (Semnsa). 

A inicios de diciembre, Juan Salas, actual Alcalde de General Cepeda, reiteró que su administración formará una comisión en el Cabildo que revise todos los temas relacionados con el Confinamiento de Residuos Peligrosos. 

Tras la serie de quejas que se han enraizado de la instalación del basurero tóxico, en esa ocasión dijo que a la fecha ya ha sostenido un diálogo cercano con el Colectivo Sí a la Vida para atender las quejas de los campesinos que han denunciado incendios y contaminaciones en el medio ambiente por parte de la instalación de Semnsa.

¿Lo recuerda?

Rodolfo Zamora Rodríguez dijo en constantes ocasiones que “no le llegarían al precio” en la instalación del confinamiento, aunque finalmente cedió.

En marzo de este año la Profepa clausuró temporalmente la operación del basurero tóxico.