A Dolores se le recuerda con dolor, pues a sus 46 años su corazón se detuvo mientras permanecía en un hotel preparando unas grabaciones. La suerte quiso que nunca despertara y de esa manera, además de sus fieles fans, también los antros la comiencen a extrañar, pues su canción “zombie” siempre ha sido de las consentidas a la hora de colgarse del tubo.

Claro, no todos saben que Dolores O’Riordan es la creadora e intérprete de la pegajosa melodía, quien, con sus cuates del grupo The Cranberries hizo la delicia de rockeros, poperos y uno que otro grupero, que se emocionó con todo en la década de los 90 viendo a las muchachonas bailar alrededor del tubo.

Aclaremos. No se necesita ser un asiduo visitante de los diferentes tables de cualquier ciudad para saber, mediante las pláticas de obreros, albañiles y por supuesto júniors que gustan del table, que la rolita les llega hasta el fondo de su alma.

Primero por la entrada, una guitarra con acorde limpio, que a los 14 segundos pasa a otro momento estridente; el guitarrazo que siempre llama la atención y levanta a los clientes más adormilados por la bebida.

Pero también es un símbolo inequívoco de que comenzó “lo bueno”, opina un experto en esos menesteres que “Zombie” significaba el destape total, el momento cumbre de la noche.

Y lo sigue siendo, aunque en Saltillo los table dance son una leyenda ante la prohibición, eso no quita que las noches de cualquier restaurante-bar, como debe decir su giro, dispongan de canciones que representan, por su ritmo, el momento supremo de la velada.

Nadie sabe para quien escribe

Pero el tema dista de ser siquiera considerado para amenizar la noche de alguna fiesta pagana, pues comenzó su historia en 1994, tiempo en que su país de origen, Irlanda, vivía días aciagos que llevaron a la violencia y aquello derivó en la muerte de dos menores.

“La escribí originalmente en una guitarra acústica (…) Recuerdo haber estado en mi apartamento, desarrollando el coro, que era pegajoso y similar a un himno. (…) Esa fue la canción más agresiva que había escrito”, comentó O’Riordan a una revista electrónica.

Ante el hechizo de la rola, su inclusión en el disco “No Need to Argue” significó el derechazo que impulsó a este grupo, era su segundo disco y con otras melodías como “Ode to My Family” y “I Can’t Be With You” se completó una gran obra.

Entre cervezas y canciones, la famosa “Zombie” destacaba entre otras de la época, igual de pegajosas, como “Nothing Else Matters”, de Metallica y “Don’t Cry”, de Guns N’ Roses, por mencionar sólo algunas.

“El privado”, era de igual manera, el momento de lucir las mejores canciones. Según nuestro entrevistado, podías escuchar desde “Imagine”, de John Lennon”, “True”, de Spandau Ballet y algunas en español como “Te Quiero” y “Un par de Palabras”, de Hombres G.

“Al recordar aquello se enchina la piel, no todo mundo iba por sexo, el acudir con los cuates era lo mejor, el reggaeton ni en cuenta, el rock dominaba casi todo”, dice con nostalgia nuestro antrero de los 90.

Hay y habrá un montón de canciones representantativas de la época de los desnudos totales y sexo en vivo, después de los clandestinos y ahora de los restautantes-bar, pero nadie puede negar que “Zombie” sonaba y suena como un momento de gloria al calor de las cervezas.

Con motivo del fallecimiento de su creadora, rendimos un pequeño homenaje diciendo: What’s in your head, in your head… Zombie, zombie zombie-ie-ie, ie-ie oh.

NUMERALIA
 
16  millones de copias en todo el mundo vendió el disco No Need to Argue, el cual contiene la mítiza Zombie.

2 Niños, a Jonathan Ball y Tim Parry, fallecieton bajo las bombas del Ejército Republicano Irlandés en un pueblo de Inglaterra. En ellos fue inspirada la canción, como protesta.

1  Es el sitio en el que permaneció el hit “Zombie” en varios países como Francia, Bélgica, Austria, Australia y Alemania, donde más que una canción fue un himno de paz.