Ya sea en regalos, en la cena de Navidad o en los agasajos de Final de Año, cuidar tu aguinaldo o el dinero que se supone vas a destinar a esos rubros, es sumamente importante, sobre todo si no quieres padecer la dolorosa cuesta de enero.

Es el momento en el que esperar el pago de la siguiente quincena se puede convertir en lo único en lo que puedes pensar. Así que si este año quieres aprovechar bien el dinero destinado a las compras de la temporada, debes continuar con esta lectura. 

De hecho, los regalos son el primer destino que los mexicanos le dan a su aguinaldo: 20% del aguinaldo se va a destinar a este rubro, de acuerdo con un estudio de mercado sobre el particular.

Lo que proponen los expertos

La planeación siempre es fundamental a la hora de invertir en las compras propias de la Navidad. 

Pero primero es necesario que hagas un presupuesto dentro del presupuesto, es decir, que ya que sepas de cuánto dinero puedes disponer para gastar en el rubro decembrino, hagas un desglose pormenorizado de esos gastos. 

A este respecto, debes saber que de acuerdo con los especialistas, lo recomendable es destinar 30% de tu aguinaldo (al menos) para el ahorro; otro 30% al pago de deudas; y ahora sí, el resto (40%) eres libre de gastarlo en lo que desees. 

Así que el presupuesto de los regalos tendría que abarcar sólo 40% del aguinaldo, si es que estás dispuesto a gastarlo todo en ese rubro, si no, de todos modos deberá constituir un porcentaje que no supere esa cifra.

 “Pero para eso tenemos que hacer un presupuesto aparte. Una vez que dentro de los gastos generales hayamos definido el dinero para los regalos, tenemos que trabajar con ese monto y ver cómo vamos a destinarlo”, explica Fabiola Armendariz, gerente de Contenidos Financieros y Capacitación de Educación Financiera Banamex. Sólo a partir de entonces se define quién o quiénes van a recibir regalo, qué se va a obsequiar y cuánto es el aproximado que se va a gastar en cada uno.

Comienza a comparar

Si te es posible, ve a las tiendas de tu interés en momentos de poca afluencia (o sea, en estos días), para que te sea posible comparar precios y escoger tranquilamente.

“No caigas en trampas de supuestas ofertas y rebajas”, dice Fabiola.
“Si algo no lo ves necesario, aunque esté muy barato, se convertirá en un gasto que no te conviene porque puede afectar el monto de tus recursos disponibles. 
“Y si en verdad es una muy buena oferta, solo lo sabrás con una comparación de precios. 
Para comparar precios, la Internet es una excelente opción, ya que muchos establecimientos publican ‘en línea’ sus ofertas, incluyendo el “Quién es quién en los precios” de la Procuraduría Federal del Consumidor (Profeco) que puede ayudarte en la comparación.

¿Cómo lo vas a pagar?

Una vez que has planeado tus compras debes decidir de qué manera vas a pagar. Si lo harás en efectivo procura sacar el dinero justo, ya que de esa manera evitarás la tentación de tener el dinero en la mano y hacer gastos fuera de lo presupuestado.

Si vas a pagar con tarjeta de crédito, toma en cuenta que para que valga la pena deberás pagar el gasto total dentro de la fecha establecida, de lo contrario sólo conseguirás que te cobren intereses y el precio de los regalos se dispare.

“Cuando las personas pagan el saldo total de su tarjeta la mejor forma de hacerlo será al final del periodo de vencimiento, sobre todo si tu tarjeta  te brinda algún beneficio como kilometraje en los vuelos o puntos en las compras. 

Si eres totalero la mejor forma de pago es la tarjeta de crédito. Paga los regalos con el dinero que tenías presupuestado y listo”, sugieren los expertos. Lo que debes tener claro es que la tarjeta de crédito es un medio de pago y no de financiamiento.

Si no tienes planeado utilizar tu plástico, mejor evita llevarlo contigo para no caer en tentaciones. Ten claro que el uso de tarjeta de crédito debe orientarse al aumento de tu patrimonio y no al simple pago de bienes de consumo.

Si tienes plástico y suficiente control sobre éste, una opción para ahorrar en la compra de regalos es hacer pedidos ‘en línea’. En muchas ocasiones los artículos suelen ser más económicos o tener ofertas adicionales por el sólo hecho de comprarlos por ese medio.

Si tu presupuesto es muy limitado pero no quieres dejar pasar estas fechas sin regalar algo, puedes hacer tú mismo/a los regalos. Un buen detalle, por ejemplo, sería regalar especias o frutos secos envasados en frascos de vidrio decorado.

Recomendaciones para la cena

Establece que alguien de la familia sea el que organice todo. “Esa persona tiene que hacer un listado de los insumos que se van a requerir para la cena. Él o ella debe dar a conocer, con base en ese listado, qué es lo que  cada quien tiene que aportar. De esta forma se evita la fuerte inversión de la familia anfitriona, que es la que siempre termina gastando más”, explica la diseñadora de eventos Vero Palacios.

Esto va a permitir que se coopere con orden —y que no terminen comiendo tres tipos de pastas porque algunos quisieron hacer su aporte aparte.

Además puntualiza lo siguiente

* Que los participantes confirmen su asistencia a tiempo. Muchas veces no todos aseguran que irán a la cena y de pronto el mero día van llegando más personas de las que originalmente dijeron que sí o al revés, se esperaba más gente y terminan llegando menos, lo cual genera ya sea compras de último minuto o comida desperdiciada. “Busca un buen método de confirmación para que todos avisen con tiempo quien va y quien no”, sostiene Vero.

* Evita las compras de último minuto. Es un consejo que se da una y otra vez pero, que levante la mano quién no ha gastado de más por esta razón. Hielos, refrescos, cubiertos desechables. Para evitar correr a una tienda —en las que luego salen más caras las cosas— haz una lista a detalle de lo que vas a ocupar.

* Compra primero los ingredientes. Durante diciembre los alimentos básicos suelen subir de precio. El año pasado, la Cámara Nacional de Comercio, Servicios y Turismo en Pequeño de la Ciudad de México (Canacope) alertó que a los consumidores de último momento les estaba costando pagar hasta 300% más comprar productos básicos como el jitomate, por ejemplo. Así, la recomendación del sitio de asesoría financiera Money Crashers es que compres los ingredientes cuando los precios están bajos. “Por ejemplo, puedes comprar la carne o el pescado con dos semanas de anticipación y ponerlos en el congelador, así, cuando el momento llegue, vas a tenerlo todo listo”, señala Vero.

* Calcula bien. Esto tiene que ver con cuántos miembros de la familia confirman y con las proporciones correctas, recomienda Money Crashers: “Cocinar de más significa gastar más, así que calcula bien, así ahorrarás dinero y molestias”.

* Hazla en casa. Es mucho más económico cocinar en casa que comprar la comida hecha, así que date tiempo para preparar las cosas.

* Hay de platillos a platillos. Escoge aquellos que no vayan a lesionar tu bolsillo. Hay mucha variedad de guisos mexicanos que pueden ser llenadores y económicos —sobre todo si es que tendrás a muchos invitados. Pozole, papa con chorizo, enchiladas… pueden ser opciones. Si el bacalao es caro para tus posibilidades, cocina atún a la vizcaína, que es muy parecido y muy rico. 

De igual manera, si quieren ahorrarse el pavo, está la posibilidad de cenar pierna de cerdo. (El Universal)