La Procuraduría para Niños, Niñas y la Familia en Coahuila (Pronnif) ha perdido 10 de 12 denuncias que ha dado seguimiento la organización Luz y Esperanza, sostuvo Tomy Vives, regidora de Saltillo y quien respalda a esta asociación, al considerar que la dependencia estatal ha perdido en los juzgados por priorizar un presunto amiguismo o tráfico de influencias antes de ver por los menores. 

La Edil aseguró que las autoridades tuvieron desinterés en las carpetas, o éstas fueron retrasadas por lo menos en los 10 casos que fueron resueltos vía esta organización.

“Se comprobó la falta de oficio, así como la mala fe, en donde pesaban más las amistades y los compromisos”, expresó. 

 El caso más sonado fue el de Ángela Hernández, quien denunció que la Pronnif le quitó a su hijo Santiago, para ser entregado a los padres de su exesposo, quien se presumía, tenía una relación cercana con la titular de dicha procuraduría.

Vives dijo que los dos casos que tiene pendientes Luz y Esperanza, son de hace cuatro y nueve años, y provienen de denuncias de mujeres en situación similar a la de Ángela Hernández.

Representantes de asociaciones civiles han denunciado la actuación de la Pronnif, y activistas como Aída Badillo, exigen la renuncia de su titular, Yezka Garza, y la subprocuradora, Mayela Reyes.