Voces provenientes de: El Salvador, Honduras, Guatemala y México sonaron al unísono con miembros de la asociación Artescénica, erizando la piel de los presentes al final de una velada íntima donde artistas visitaron la Casa del Migrante de Saltillo.

“Voz y canto nos quitan la tristeza y llenan de esperanza”, declaró el padre Pantoja a integrantes de la asociación como parte de su intervención de agradecimiento por la visita de los artistas. “Gracias por haber querido venir, un artista es artista por su corazón”, agregó.

Alrededor de las 18:30 horas, miembros del colectivo Artescénica visitaron la Casa del Migrante, compartieron cena con decenas de migrantes que más tarde acomodaron hileras de sillas para disfrutar de una función única con los artistas; fuera de toda gala, cantantes se entregaron al público sin distinción.

La canción de “La Bamba” sirvió para romper el hielo entre los presentes, logrando arrancar aplausos y movimientos, pero fue sin duda cada una de las estrofas de “El Rey” de José Alfredo Jiménez, la canción que conmovió a los presentes, en la parte final de la visita.

Hombres y mujeres de diferentes edades y nacionalidades se unieron en un solo abrazo cantando a todo pulmón la canción mexicana, que finalizó con un “Viva Latinoamérica” de una voz anónima del público.

Después de tres horas de convivencia, artistas se despidieron del público entre abrazos. “Nos llevamos alegría y satisfacción de haber estado aquí, agradecimiento”, confesó uno de los integrantes del colectivo al abandonar la Casa.