Muerte de Javier Valdez, reflejo de 'narcoviolencia' en México: Tillerson

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Muerte de Javier Valdez, reflejo de 'narcoviolencia' en México: Tillerson

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El secretario de Estado de Estados Unidos ofreció su pésame a México y a los familiares del corresponsal de La Jornada en Sinaloa

Washington. El secretario de Estado de Estados Unidos, Rex Tillerson, dijo hoy que la muerte del periodista mexicano Javier Valdez refleja la violencia del narcotráfico.

Los estadunidenses "debemos de aceptar" que tenemos un problema de adicción a narcóticos si es que se quiere poner fin al flagelo del narcotráfico y la violencia transfronteriza, dijo el funcionario.

Tillerson habló tras conversar con altos funcionarios mexicanos sobre la lucha contra el crimen transnacional.

Agregó que la demanda estadunidense de opioides y otras drogas es una de las principales responsables de la devastadora cantidad de muertes por sobredosis en Estados Unidos y también de la narcoviolencia en México.

Tillerson ofreció su pésame a México y a los familiares del corresponsal de La Jornada en Sinaloa.

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No hay avances

A más de 48 horas de iniciadas las investigaciones por el asesinato del periodista Javier Valdez Cárdenas, la Fiscalía General de Justicia de Sinaloa no tiene ningún avance sobre el caso.

La institución ministerial no ha establecido aún cuántos fueron los agresores, desconoce la ruta por la que huyeron y no ha precisado siquiera si alguna cámara de video grabó su recorrido por las calles de Culiacán.

El fiscal Juan José Ríos Estivillo, en entrevista con este diario, señaló que no es momento en que se pueda identificar a algún grupo del crimen organizado como responsable del homicidio del corresponsal de La Jornada y cofundador del semanario Ríodoce.

En conferencia de prensa realizada antes de la entrevista, señaló que la principal línea de investigación en el homicidio de Javier Valdez está relacionada con su actividad periodística, aunque aclaró que aún no se descarta la posibilidad de que el asesinato se haya cometido para robarle el vehículo en que se transportaba.

Si bien es cierto que la primera de las líneas, la que se relaciona con el robo de vehículo, puede generar modificaciones sustanciales en la integración de la carpeta (de investigación), en virtud de la información que se vaya obteniendo se confirmará o desechará esa versión. Sin embargo, de manera primaria se constituye como principal línea de investigación las actividades periodísticas de Javier Valdez.

Foto: Especial

Al ser cuestionado acerca de los avances de la investigación, el fiscal Ríos Estivillo reconoció que no se habían concluido los peritajes relacionados con la manera en que sucedieron los hechos, ni se había determinado la ruta específica por la que huyeron los agresores del autor de Los huérfanos del narco.

Asimismo, el funcionario se negó a mencionar el número de sicarios que dispararon hasta en 12 ocasiones contra el periodista abatido el lunes pasado cerca de las oficinas del semanario Ríodoce.

En el encuentro con la prensa, señaló que tampoco es posible establecer o identificar qué grupo criminal fue el autor del asesinato.

El titular de la Fiscalía General de Justicia de Sinaloa anunció que se brindará resguardo a las instalaciones del semanario Ríodoce, a los familiares de Javier Valdez y a algunos ex compañeros del periodista y escritor.

En este contexto, el editorial de Ríodoce, publicado un día después de la muerte de Valdez Cárdenas, señala: “No podemos dejar de cubrir temas del narcotráfico, decíamos; menos ahora que el fenómeno es más amplio y profundo. Nacimos para la información, no para el silencio, sosteníamos, y nos debíamos congruencia. El problema es cómo hacerlo. Por eso tratamos de tener siempre cuidado de no cruzar esas líneas tan delgadas cuya transgresión puede significar la muerte.

“No tenemos ninguna duda: el origen del crimen de Javier Valdez está en su trabajo periodístico relacionado con los temas del narcotráfico. No sabemos de qué parte, de qué familia, de qué organización provino la orden. Pero fueron ellos.

Esperaríamos del gobierno estatal y del federal que se abocaran a investigar y castigar este crimen. Pero, sabiendo el destino de la mayoría de los casos, sin muchas esperanzas de que hagan justicia.