“Robert Ryman” se trata de la primera exposición individual que se realiza en America Latina del artista. 24 piezas reúnen parte de su trabajo desde los 50's hasta finales de los 90's, siendo la curadora de la serie Courtney J. Martin.

Martin dijo para La Jornada, al respecto de esta obra pictórica que, “ninguna de sus pinturas son realmente blancas. Si se aprecian de cerca, son de tonos y matices diferentes. Es, en realidad, una conversación con la luz, con la iluminación. Las obras reaccionan a la luz natural y a la artificial, pero también con los diferentes tipos de superficies, lo cual las hace pinturas vibrantes”.

Estos “cuadros blancos”, tan fácilmente criticables por la mirada inexperta, encierran, como dijo la curadora, estudios plásticos que encierran más de una perspectiva. No se trata de simples brochazos de pintura blanca, sino de concienzudos trazos que buscan un objetivo específico: la representación de los materiales que utiliza.

Ella también describe a Ryman como un conocedor de sus materiales “Su noción de pintura se extiende a relieves y obras tridimensionales en las que la materialidad de la superficie de soporte se exhibe como parte de una interacción ininterrumpida con la arquitectura de la sala”.

Fuente: La Jornada