Ordena magnate levantar muralla

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Ordena magnate levantar muralla

Acusación. Donald Trump dijo que la criminalidad y la falta de trabajos en EU se debe a los migrantes.
Según Trump, el financiamiento para la construcción del muro se hará de una “manera compleja”, aunque insistió en que México pagará por él.

WASHINGTON.- El muro va y empezará a construirse lo antes posible, en cuestión de meses. La amenaza se hizo realidad y este miércoles el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, firmó el decreto por el cual ordenó que se inicien las obras para la construcción del “impenetrable, físico, alto, poderoso y bonito” muro en la frontera con México, una barrera “continua” e “impenetrable” que cumpla una nueva promesa electoral y, de paso, ataque a la comunidad inmigrante del País.

Trump había convertido a los 11 millones de inmigrantes indocumentados que se calcula que hay en EU (la mayoría de origen mexicano) en los mayores enemigos del país, causantes de muchos de los problemas que vive la clase obrera estadounidense.

Según la retórica que manejó en su campaña electoral, la criminalidad y la falta de trabajos son, en gran parte, por su presencia: su mensaje antiinmigrante caló entre el electorado que lo impulsó a la Casa Blanca y ayer vía decreto les dio su recompensa.

La segunda ordena suspender fondos federales para las llamadas “ciudades santuario”.

Según Trump, el financiamiento para la construcción del muro se hará de una “manera compleja”, aunque insistió en que México pagará por él.

El documento establece que la información se debe entregar en 30 días al Departamento de Estado, el cual deberá dar al presidente un “informe consolidado” en un plazo de 60 días, que refleje el monto anual de las ayudas. 

Un estudio del Instituto Tecnológico de Massachusets dice que el muro costaría hasta 40 mil millones. 

Órdenes ejecutivas:
> Una que autoriza la construcción del muro, el cual estará “vigilado y apoyado por personal adecuado para prevenir la inmigración ilegal.
>  La segunda ordena suspender fondos federales para las llamadas “ciudades santuario”.