SUIZA.- Roger Federer tacha los días para volver a jugar. Después de un 2016 marcado por una lesión en la rodilla izquierda que le ha tenido seis meses sin competir, el suizo está cerca de volver a competir. Del 2 de enero al 9 del mismo mes, participará en la Copa Hopman, antesala del Abierto de Australia.

Roger Federer no compite desde las semifinales de Wimbledon, en donde perdió ante Milos Raonic. Evidentemente, ha ido bajando en la clasificación y actualmente es el 16 del mundo, una posición llamativa para alguien que ha estado más de 300 semanas en lo más alto de la ATP.

Con ese horizonte, Federer compartió el día de ayer, en vivo y a través de sus redes sociales, una práctica íntegra con Lucas Pouille en Dubai, donde se lo pudo ver ejercitando con el preparador físico, Pierre Paganini, y luego disputando algunos games ante el francés.

Con micrófono abierto, Federer fue relatando parte del entrenamiento y revelando interesantes detalles de su rutina y de su equipo de trabajo. Al finalizar, mantuvo la conexión con sus seguidores con el clásico “Ask Me Anything” (Pregúntame lo que quieras), donde se divirtió durante más de 20 minutos contestando sobre su carrera y curiosidades extratenísticas.

“Han sido seis meses muy raros. Los primeros tres fueron extremadamente lentos, solo rehabilitando la rodilla y dándole el suficiente descanso. Ahora ya estoy absolutamente listo y con muchas ganas de que empiece todo nuevamente”, se entusiasmó Roger.

“Todavía no sé cómo va a ser mi calendario -detalló, consultado puntualmente sobre la gira de arcilla-. Primero quiero ver cómo funciona todo en la Hopman y en el Abierto de Australia. Pero es bueno que hoy la preocupación sea dónde juego y no estar temiendo día a día cómo responde la rodilla”.

“Extraño todo del circuito. Quiero volver a los torneos, a sentir el contacto con el público, a llegar lejos en los cuadros”, siguió Federer, que en la transmisión también mostró las nuevas raquetas con las que jugará en 2017.

Además, se refirió a la flamante unión entre Rafael Nadal y Carlos Moyá: “Se conocen mucho, encajan muy bien el uno con el otro. Siempre es bueno verlo a Carlos en el circuito. Ya me había alegrado que estuviera con Milos [Raonic]”.

Federer también dejó implícito que 2018 lo verá nuevamente en acción, aunque ante la pregunta sobre los Juegos Olímpicos de 2020, fue cauto: “Es mirar muy lejos en el tiempo, pero nunca se sabe. No lo pensé todavía”.