NOGALES, SON.- El trabajo conjunto del personal de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE), y la Policía Estatal Investigadora (PEI), llevaron a la ubicación del cuerpo sin vida del niño Ángel G., de dos años, con padecimiento de hidrocefalia, reportado como extraviado el pasado miércoles 7 de diciembre en esta frontera.

La Procuraduría General de Justicia del Estado, informó que Rosario A de 19 años de edad, madre del menor, fue detenida por agentes de la Policía Estatal Investigadora y permanece bajo custodia en el Hospital General, debido a que está embarazada.

Tras una intensa búsqueda se localizó al infante a las 21:00 horas, del jueves 8 de diciembre, en el camino a El Sáric, aproximadamente a 300 metros donde concluye el pavimento.

En la búsqueda participaron elementos de las policías Estatal Investigadora, de la Estatal Preventiva de Seguridad Pública (PESP), Bomberos, Protección Civil, un perro entrenado y un grupo todo terreno.

Tras activarse la Alerta Amber a unas horas del reporte de extravío del menor, los elementos de la Policía Estatal Investigadora implementaron un operativo de búsqueda del pequeño Ángel G., ya que presuntamente había sido sustraído de un vehículo cuando la madre lo dejó durante 15 minutos para entrar a una tienda de ropa.

Al interrogar los investigadores de la Procuraduría General de Justicia a la madre del menor, y al incurrir en algunas contradicciones al responder, se sospechó de otra situación, por lo que las autoridades incrementaron las indagatorias.

Luego de corroborar antecedentes de maltrato hacia el menor, con familiares, vecinos y autoridades, la mujer terminó por revelar a su pareja lo que realmente ocurrió.

Según la declaración de la imputada, aparentemente el menor se le cayó y se golpeó con el piso, lo que le provocó la muerte. Dice que se espantó y optó por ir a dejar el cuerpo del niño en el sitio donde se hizo el hallazgo.

El cuerpo del menor presentaba golpes múltiples en diversas partes, uno contuso y reciente en la cabeza, que al parecer fue lo que lo privó de la vida según el dictamen preliminar de peritos. Agentes del Ministerio Público, de la Procuraduría General del Estado (PGJE), la presentarán ante el juez como imputada por el delito de homicidio calificado y podría recibir una pena de prisión mínima de 30 años y máxima de 50.