Estudiantes de la FCPyS declararon que al momento de presentar denuncias ante el jurídico de la facultad y de la UNAM, los defensores optan por disuadirlas parar no proseguir con el proceso.

Lourdes, quien pidió cambiársele el nombre por motivos de seguridad, denunció que fue videograbada mientras estaba en el baño de la facultad.

De acuerdo con el testimonio de la estudiante, se percató de que en el suelo de entre ambos baños estaba escondido un teléfono celular en una mochila.

“Cuando iba a bajar la palanca, observé en el piso del baño de al lado, un celular acomodado en la bolsa lateral de una mochila, de manera en que pudiera ver con la cámara cuando las chicas estuvieran orinando”, relató.

La joven regresó a su salón de clases para pedir apoyo y lograr sacar al hombre que, posteriormente se identificó como Carlos Omar Romero Martínez, presunto estudiante de la Facultad de Ingeniería, de noveno semestre.

Al acudir con los encargados de informática de la FCPyS se le encontraron al acusado dos teléfonos celulares con imágenes de otras mujeres en baños, fotografías de piernas y busto.

La estudiante declaró que el abogado Horacio Hernández, de la misma facultad, intentó persuadirla para que no prosiguiera su denuncia, debido a que el presunto acosador había perdido perdón.

La joven rechazó la propuesta y dijo que se dirigieron a la Agencia Especializada en Atención a la Comunidad Universitaria, donde no continúo el proceso debido a que la autoridad consideró que no había sido agredida al no poder culpar al joven de “pornografía”.

“Este diario buscó una entrevista con la directora doctora Angélica Cuéllar, además de conocer el número de denuncias por el acoso sexual al interior, asaltos y agresiones,  sin recibir respuesta de la UNAM.