En el ámbito educativo se han realizado diversos estudios sobre la enseñanza reflexiva. Este modelo de formación asume que la interacción con los demás y la reflexión son esenciales para poder aprender.

John Dewey, uno de los pedagogos más influyentes del Siglo 20, estableció una importante distinción entre la acciones reflexivas y las rutinarias, principalmente esto era un llamado a los educadores y es perfectamente aplicable a ciudadanos e instituciones que buscamos una mejor sociedad.

Según Dewey, la acción rutinaria está dirigida ante todo por el impulso, la tradición y la autoridad y la acción reflexiva supone una consideración activa, persistente y cuidadosa de toda práctica, a la luz de los fundamentos que la sostienen y de las consecuencias a las que conduce. Se trata de dejar atrás la acción rutinaria para asumir una acción reflexiva en lo que a participación ciudadana se refiere.

La reflexión es una forma de afrontar y responder a los problemas y constituye también un proceso más amplio que el de la solución lógica ya que implica además intuición, emoción y pasión. Estas mismas actitudes son necesarias en la participación del ciudadano. Es indispensable estar informado para poder emitir una opinión, pero es también un requisito que exista la pasión y el compromiso de construir conapertura intelectual,con responsabilidad y desde la sinceridad. 

Desafortunadamente, la participación de los ciudadanos en la toma de decisiones de Estado y en los asuntos públicos es muy baja. Así lo demuestra la Encuesta Nacional sobre Cultura Política y Prácticas Ciudadanas (ENCUP) presentada recientemente por Secretaría de Gobernación (SEGOB) y el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI) así como en el Informe País sobre la Calidad de la Ciudadanía en México, presentado por El Instituto Nacional Electoral (INE),  además la participación de los ciudadanos suelen ser acciones rutinarias y no reflexivas. 

Es necesario que enfrentemos con compromiso el importante papel que debe jugar la sociedad civil, que mantengamos la apertura intelectual tanto para informarnos de los temas que nos afectan como para atender otros puntos de vista y considerar las posibles alternativas, reconociendo la posibilidad de errores y, con base en ello, participar de modo que lareflexión nos lleve a la acción.

El Consejo Cívico de las Instituciones de Coahuila, es una asociación civil integrada por organismos y ciudadanos coahuilenses, establecida en Saltillo, Coahuila, desde octubre de 2012. Nuestro interés es trabajar en forma coordinada por una mejor sociedad y coadyuvar a un mejor Gobierno.

Hoy presentamos éste proyecto de participación ciudadana que consiste en invitar al lector a la reflexión, en temas de actualidad que impactan nuestro entorno.

Contaremos con una publicación semanal en esta sección. Usted podrá leer en esta columna la opinión de líderes ciudadanos que colaboran con los programas del Consejo Cívico de las Instituciones de Coahuila, así como las participaciones de colaboradores invitados que bien pueden formar parte de organismos aliados o ser ciudadanos destacados ya sea por su participación o bien por su opinión. También esperamos la colaboración de expertos en temas de interés actual.

Deseamos que usted encuentre en este espacio una oportunidad de reflexión y análisis de los hechos que afectan nuestra vida y, principalmente, que estas reflexiones le motiven a ser un agente de cambio social positivo para nuestro País.

Si usted desea colaborar con este proyecto envíenos sus datos de contacto a: opinionciudadana@ccic.org.mx.

Alejandra Wade @alewade
Directora del Consejo Cívico de las Instituciones de Coahuila AC 

Consejo Cívico de las Instituciones de Coahuila @CCICOAH