El controvertido campeón mundial de peso pesado, Tyson Fury no ha entrenado en meses, está luchando contra la depresión, pensamientos suicidas, tiene un problema con la bebida y, en sus propias palabras, "he consumido cocaína. Mucha de ella”.

Fury admitió su situación este lunes en una entrevista con la revista Rolling Stone y la cual se publicó en su página web este martes. En el momento de la entrevista, Fuy dijo que ha estado sobrio durante tres días.

"He hecho muchas cosas en mi vida. He consumido un montón de cocaína. Mucha de ella", dijo Fury en la entrevista. "¿Por qué no debería tomar cocaína? Es mi vida ¿no es así? Puedo hacer lo que quiero. Sí, me consumido cocaína. Muchas personas han consumido la cocaína también. ¿Qué se puede hacer con eso?

"No es una sustancia que mejore el rendimiento. ¿No está permitido tener una vida ahora tampoco? ¿Quieren manejar mi vida personal también? No he estado en un gimnasio durante meses. No he estado entrenando. He sobrellevado la depresión. Es sólo que no quiero vivir más, si saben lo que estoy diciendo. Ya he tenido suficiente. Simplemente no me importaba. No quiero vivir más. Así que la cocaína es una cosa menor en comparación con no querer vivir más".

Hace 11 meses, Fury ganó el título de peso pesado por decisión unánime contra Wladimir Klitschko, en lo que se consideró una sorpresa mayúscula , una de las más grandes de la historia. Pero todo se ha ido cuesta abajo, ya que para Fury, originario de Inglaterra y quien evadió la revancha en julio argumentado un esguince de tobillo, antes de que la nueva fecha, pactada para el 29 de octubre, también fuera cancelada hace dos semanas.

Cuando se le preguntó si él descartó la fecha de julio debido a sus problemas, en lugar de una lesión de tobillo, Fury dijo que no tenía nada.

"Para ser honestos, sí", dijo. "No he estado en el gimnasio durante meses. He estado ausente sin permiso. He estado bebiendo, haciendo cualquier cosa para distraer mi mente".

Fury dijo en la entrevista que comenzó a usar la cocaína hace unos meses, a pesar del riesgo de ser despojado de sus dos títulos mundiales, además de la inactividad de más de un año. Pero Fury (25-0, 18 KOs), de 28 años, tiene claro cuestiones que, por ahora, hay cosas más importantes en su vida en este momento que retener sus títulos.

"Estoy pasando por un infierno personal, tratando de quitarme muchos demonios de encima," Fury dijo a Rolling Stone. "Esto no tiene nada que ver con el box. Lo que estoy pasando ahora es mi vida personal. ... Dicen que soy bipolar. Soy un maníaco depresivo. Sólo espero que alguien me mate antes de que me suicide."