Saltillo.- Un padre de familia fue asesinado a batazos por una turba de pandilleros quienes se ensañaron con él dejándolo muerto en la puerta de su domicilio, en donde su pareja lloraba inconsolable mientras que las autoridades buscaban al responsable, sin éxito. Además una persona se debate entre la vida y la muerte al recibir un machetazo en la cabeza.

Durante la madrugada del domingo, alrededor de las 2:30 de la madrugada, se presentó una salvaje riña en la calle en la calle 15 de la colonia Hidalgo. Los "catrines", como se hace llamar el grupo de pandilleros, llegaron con todo a golpear a unos jóvenes en esa calle.

En ese momento, al escuchar la riña, Antonio García, de 38 años, salió de su domicilio que se encuentra en el cruce de la calle 15y 56, con machete en mano para arremeter contra los pandilleros al pensar que a quien agredían era a su hijo.

Al herir a José Juan Martínez, de 53 años, en la cabeza con el machete fue desarmado por los pandilleros quienes lo golpearon hasta matarlo, muerte que encontró, según testigos, al ser bateado en la cabeza en repetidas ocasiones, justo en la puerta de su domicilio.

Los vecinos identificaron a varios pandilleros, a quienes conocen de apodo: " el sindi", "el gohan", "la rata" y "el kema", este ultimo presuntamente responde al nombre de Luis Daniel Segovia, quien es señalado como el asesino.

Luego de acabar con la vida de "toño" como era conocido por amigos y familiares, los delincuentes salieron huyendo, en ese momento paramédicos de Cruz Roja llegaron para realizar el traslado del macheteado a la clínica dos del seguro social en donde se reporta al borde de la muerte.

Por su parte elementos de la Policía Municipal y del GROM, realizaron varios recorridos por el sector, incluso fueron al domicilio en donde vive el presunto responsable, sin embargo no lograron dar con su paradero.

Las investigaciones quedaron a cargo del grupo de homicidios de la Procuraduría General de Justicia del Estado quienes llegaron a tomar conocimiento del deceso para trasladar el cadáver al SEMEFO y continuar la búsqueda de los responsables.