Este año fue uno de los mejores para la manzana de Arteaga. Los productores de esta fruta planean tener una producción estimada en más de un millón de cajas y venderla a precios que superan en doble o incluso el triple que el año pasado. 

Jesús Durán Flores, alcalde de Arteaga, detalló que el costo por caja de manzana Golden varía en los mercados de la Ciudad de México entre 350 y 400 pesos, aproximadamente. En contraparte, el año pasado los precios de la fruta estaba en el mercado entre 150 y 200 pesos. 

“La meta para este año es de un millón de cajas y vamos a superarla. En esta semana me reuní con uno de los manzaneros más importantes de la región y decía que tenía pensado que podría haber más manzanas”, dijo el Edil. 

Durán Flores reconoció que el mercado estadounidense les ha afectado pues aunque México no exporta este tipo de producto, el país vecino sí lo hace. Ante ello tienen que estar implementando estrategias salir perjudicados en la comercialización. 

“México no exporta manzanas, todo el mercado es nacional. Estados Unidos sí exporta y es quien nos está afectando. Nosotros estamos haciendo un frente, primero con la cosecha de mejores manzanas; tratamos de que las manzanas americanas paguen los aranceles y eso nos ayuda a nosotros a levantar”, explicó. 

En noviembre del año pasado, VANGUARDIA publicó que el kilo de manzanas que resultaron dañadas por la plaga “tizón” era rechazado por los comerciantes y en última instancia era ofrecido por los productores hasta en 50 centavos el kilo. 

PÉRDIDAS EN 2015 
Óscar Muñoz Casas, un hombre de 86 años, y uno de los principales productores de manzana en la región, aseguró que nunca habían existido tantas pérdidas como en 2015. Es dueño de 3 hectáreas donde planta árboles de manzana roja y Golden —las 2 variedades que más se producen en el sector—. 

Mientras en 2014 su producción fue de 300 cajas de manzana de las 2 variedades, en 2015 hubo pérdida total en la fruta de buena calidad, pues apenas si sacaron 85 costales que fue malbaratada por los ingenieros; en cambio otra parte de la fruta no costeó ni siquiera pizcarla.