El Real Madrid, líder de la Liga española de fútbol, aspira mañana a sumar con Zinedine Zidane en el banquillo y en el estadio del Espanyol su décimo sexta victoria consecutiva, e igualar así el histórico registro del Barcelona de Josep Guardiola en la temporada 2010-11.

"Nos hace ilusión el récord", reconoció Zidane en la rueda de prensa previa al partido, "pero sobre todo nos hace ilusión seguir ganando y sumando puntos", destacó el entrenador.

El Real Madrid visitará al Espanyol con las sensibles bajas de Cristiano Ronaldo y Gareth Bale, piezas clave del tridente ofensivo del conjunto blanco, la temible BBC.

"Si tengo a Cristiano, Bale y Benzema al 100 por ciento la idea es que jueguen ellos, pero no significa que tengan que jugar siempre", explicó el técnico del campeón de Europa.

"Cristiano está mal de la garganta, no vamos a arriesgar y menos con él", manifestó en este sentido.

"El Expreso de Cardiff" tampoco viajará a Barcelona. El galés sufrió un golpe en la cadera en el duro partido que los blancos afrontaron el pasado miércoles en el Santiago Bernabéu ante el Sporting de Lisboa. "Todos quieren jugar pero tenemos partido cada tres días", argumentó el técnico.

El Real Madrid se verá por tanto obligado a introducir cambios respecto al once de gala que utilizó para doblegar en el último instante por 2-1 al equipo lisboeta. "Mi idea es siempre intentar rotar, quiero que mis futbolistas piensen que pueden jugar en cualquier momento", recalcó Zidane.

Así, James Rodríguez, que disputó 13 minutos en el choque europeo y cuya presencia resultó capital con un centro milimétrico a la cabeza de Álvaro Morata para anotar en el 94' el gol de la victoria, se postula como principal candidato a formar en el equipo titular.

"James va a jugar, es importante para nosotros, va aportar lo que tiene que aportar, y por supuesto que puede volver a ser el del primer año", concedió sobre el colombiano su entrenador.

Otros futbolistas, especialistas en rentabilizar al máximo sus minutos sobre el césped, como el canterano Lucas Vázquez, el croata Mateo Kovacic, o el joven diamante madridista Marco Asensio también aspiran a jugar de inicio ante el Espanyol.

Isco, recién salido de una lesión, podría asimismo tener su oportunidad en los planes de Zidane.

El Real Madrid visita un estadio, Cornellá, en el que sólo concedió una derrota y un empate en las últimas diez temporadas. No obstante, Zidane no se mostró en absoluto confiado ante el choque contra el Espanyol. "Es un rival muy bueno y un partido complicado", alertó.

"Si el Espanyol ofrece su mejor versión, tendremos oportunidades", afirmó Pablo Piatti, "aunque no podemos cometer errores", subrayó el delantero argentino de los blanquiazules.

Más allá fue el entrenador del equipo, Enrique Sánchez Flores. "Queremos divertirnos", aseguró el técnico del Espanyol.

"Nuestra idea es ganar", abundó el arquero españolista Diego López, que jugó en la temporada 2013-14 en Real Madrid y vivió un pulso mediático y deportivo con el legendario futbolista blanco Iker Casillas por la titularidad en el arco madridista.

"Las situaciones adversas te hacen crecer y madurar", explicó López esta semana.

Aún sin Bale ni Cristiano enfrente, López tendrá la responsabilidad de frenar el imponente caudal ofensivo de un Real Madrid, que quiere seguir una semana más en la cima de la Liga española e igualar un récord histórico del Barcelona.