Primera.- “Ya basta de que se violen nuestros derechos humanos. Nosotros aportamos cada quincena para tener un buen servicio médico y no es así. “Ahora hasta las gasas nos quieren cobrar”, externaba una de las líderes que encabezó el contingente que realizó una gira de protesta que terminó en el plantón del Palacio Rosa de Saltillo.

Los pendientes derivados de omisiones gubernamentales y la cuestionable administración de diversos encargados de las pensiones y servicios médicos de los miembros de la Sección 38, ocasionaron no solamente el gran boquete que existe para cubrir las jubilaciones de los maestros, sino que ahora llega  a los servicios de salud y los medicamentos.

¿Por qué no se voltea hacia las residencias, ranchos y paraísos vacacionales de los exsecretarios del SNTE o los “administradores” de las pensiones de los maestros? Si quieren saber dónde pararon esas comaladas de billetes busquen en los autos de lujo, yates, ranchos ganaderos (hasta de avestruces) y resorts en la sierra de Arteaga, en donde reposan bien guardaditas las cuotas.

Lo más lamentable son los contrastes en los montos de pensiones de maestros que laboraron 30 años  con tiempo completo y reciben 17 mil pesos mensuales contra los “funcionarios sindicales y comisionados” que se llevan cerca de 40 mil pesos sin haber pisado un aula. ¿Quieren ejemplos?

Y como muestra, la Secretaría de Educación del Estado (Sedu), declaró que dejó de pagar entre 20 y 30 millones de pesos por concepto de los sueldos a 308 trabajadores “comisionados” a los nuevos comités de las Secciones 5, 35 y 38 del SNTE, mismas que deberán de cubrir los salarios de los empleados designados ¿De dónde sale el dinero para esos sueldos?

La última: Dos maestros que intentaron entrar a Palacio de Gobierno para exigir que los atendiera el Gobernador y provocaron, dice una voz interna, que el secretario de Gobierno solicitara la intervención del Ejército Mexicano para “garantizar la seguridad del jefe del Ejecutivo”. (Demócrata  abril 19/2016).

Segunda.- El mensaje más que cifrado en el tenme-aquí del líder nacional del PRI a través de un video transmitido en la asamblea estatal del PRI, refirió que en la contienda por la gubernatura de Coahuila no está nada definido. El anunciado destape del “candidato de unidad” se suspendió ante la cara larga y el rechinar de dientes de funcionarios de alto nivel y hoy día, en la ecuación se sumaran los factores de Hilda, Tereso y Guerrero, ante una ya muy posible eclosión en el partido que ha gobernado Coahuila en los últimos 89 años y sobre todo porque es posible que se frene el proyecto de 18 años.

El directamente beneficiado es Isidro López, quien a pesar de las diarias críticas recibidas por plumas con dueño y bien “aceitadas”, aprovechará la coyuntura para calarse con o sin partido. Hay que recordar que la estrategia del hoy alcalde de Saltillo, fue rescatar el voto apático y de esos  hay muchos en Coahuila.

Tercera.- Cuando vivía en la frontera, recuerdo que en una ocasión compré un auto en Eagle Pass y me pidieron que fuera con el Notario Público para que me sellara el título. Preguntando por uno, vi que el dueño de una florería era fedatario de Texas, mismo que interrumpió sus funciones para imponer el relieve al título por la suma de cinco dólares americanos y arreglado Matamoros.

En Coahuila, los notarios son una rara especie y hay lugares en donde existen más, que tiendas de conveniencia, como en: San Pedro, Allende, Villa Unión, Ramos, Progreso, Sierra Mojada, Parras, Ocampo, San Juan de Sabinas, aunque usted no lo crea.

Éramos muchos y parió la abuela, porque resulta que por decreto real en el Estado amanecemos con 41 nuevos fedatarios, entre los que se incluyen: juniors, funcionarios, pero sobre todo, inexpertos abogados, que fueron perdonados de presentar examen de conocimientos.

Ante la protesta del gremio notarial, la amenaza de abrir investigaciones motivó un sepulcral silencio, la misma mano que las otorga, es la que puede cancelarlas y eso es escupir pal cielo ¿o no?

Otro sí.- “Para seguir construyendo” dicta el lema de la campaña a la rectoría de Blas Flores y efectivamente su mecenas el Negro Ochoa (de quien fue tesorero), sigue construyendo, pero su palacete vacacional en Bella Unión, que descaro.